De acuerdo con un estudio, algunos tramos del Tren Maya presentan fallas en el terreno sobre el que se construye la vía que abarcará cinco estados del sureste mexicano, incluso tienen un 75% de probabilidad de riesgos geológicos.

“De Mérida a Cancún se ha detectado roca caliza y una probabilidad del 75% de riesgo en los tramos más complicados”. Esta probabilidad se encuentra en Golfo 3 (Tramo 4), Caribe 1 (Tramo 6) y Selva 2 (Tramo 7).

Así, la ruta original para el tramo 4 era diferente, y después se evitó una zona debido a que representaba riesgos geológicos, refirió una publicación de Expansión.

El cambio provocó una disminución en la estimación de la rentabilidad de la obra en un 8% y aumento de un 12.2% en los montos de inversión requeridos.

De presentarse el riesgo en los tramos, se considera un 95% de probabilidad de que tenga un impacto alto en el calendario del proyecto con un retraso de 12 meses, más un 95% de posible sobrecosto de 20 por ciento.

A esto se agregaría un 75% de probabilidad de encontrar sitios arqueológicos que no estaban considerados en la ruta, lo que incrementaría el tiempo de edificación por seis meses.

También debe considerarse que en el resto de tramos hay una probabilidad de 25% de encontrar fallas geológicas que aumentarían el tiempo de construcción por cinco meses y del 10% en el costo.

Mientras que El Universal divulgó que en el estudio encargado a PricewaterhouseCoopers (PwC), el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) omitió varios riesgos relacionados a esta infraestructura.

 Esta información es referente al trazo, la posible demanda y los riesgos constructivos para acelerar las obras y licitaciones del Tren Maya, que se incluye en el Análisis Costo Beneficio que debe presentarse a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

Ante esta información, el Fonatur dijo que la obra es vigilada por expertos internacionales y extranjeros para garantizar su seguridad y correcto funcionamiento.

A la par, el organismo dio a conocer en el reporte de trabajo 36 de 157, que desde abril realiza ‘importantes avances’ de obra en la construcción del tramo 4, que va de Izamal a Cancún.

“La obra en este tramo aprovecha ambos cuerpos carreteros: En el cuerpo norte construimos la nueva carretera de cuatro carriles y en el cuerpo sur correrá el Tren Maya”.

Añadió que consolida los trabajos en la preparación del terreno para la infraestructura principal y que avanza en la obra de terracería, la formación del terraplén y colocación de la capa de subbase.

“Y de la y de la carpeta asfáltica que darán fortaleza y estabilidad al terreno que servirá de apoyo a las vías férreas y al tren”.