Cada año se instala, en el famoso Hyde Park de Londres, la estructura arquitectónica “Serpentine Pavillion”, un espacio, que atrae a casi un millón de visitantes y tiene como finalidad desarrollar en ella programas culturales, proyectar películas y llevar a cabo charlas, durante los meses de junio y octubre, firmas de todo el mundo como Zaha Hadid o Sou Fujimoto crean piezas únicas con materiales y estilos diversos, es el caso de la arquitecta mexicana, Frida Escobedo, quien en 2018 creó un pabellón inspirado en México.
Este año la firma arquitectónica Counterspace se encargará del Serpentine Pavilion 2020. Al consorcio lo integran Amina Kaskar, Sumayya Vally y Sarah de Villiers, provenientes de Johannesburgo. Su construcción se realizará con tecnología y materiales sostenibles como los K-Briq, los cuales están hechos de 90% de residuos reciclados provenientes de construcciones y demoliciones, su producción expulsa una décima parte de las emisiones de carbono que requiere la fabricación de un ladrillo normal.
Desde el año 2000, la Serpentine Gallery, es encargada de organizar la instalación de esta estructura efímera, sus directivos año con año seleccionan al o los arquitectos que la diseñan.
Entre los pabellones que han desfilado por el Hyde Park de Londres se encuentra la obra de Zara Hadid del año 2000, que corresponde a la arquitecta anglo-iraquí, fue la estructura inaugural, reinventó la idea de un toldo blanco triangular.
El pabellón 2002, diseñado por los arquitectos Toyoo Itō y Cecil Balmond, basados en el algoritmo de un cubo. Los numerosos triángulos y trapezoides que formaron todo el sistema eran transparentes o traslúcidos.
Rem Koolhaas y Cecil Balmond en 2006 diseñaron un todo inflable hecho de material traslúcido, el pabellón se iluminaba por las noches. Adentro, el anfiteatro dejaba un espacio abierto en el que convivían cubos de diferentes tamaños.
Los hermanos Selgascano, José Selgas y Lucía Cano, diseñaron en 2015, una colorida estructura amorfa y poligonal. Los visitantes podían entrar y salir de la pieza por diferentes accesos, pasando por un pasadizo oculto. Una de las obras más divertidas que han sido instalados.
Con información de: ARCHITECTURAL DIGEST