Tras 19 meses, las autoridades de Chile levantarán el estado de emergencia por covid, también el toque de queda nocturno, el próximo viernes, gracias al descenso en contagios, hospitalizaciones y muertes.
Además, relajarán el programa de restricciones de aforos y permisos de movilidad, de acuerdo a la evolución del Covid-19 en el país y particularmente en los territorios con mayor incidencia.
“Hemos decidido no renovar el estado de excepción”, dijo Sebastián Piñera Echenique, presidente de Chile. Indicó que la medida “fue necesaria para dotar de mayores y mejores herramientas” al país.
Esto, “para combatir la pandemia”, pues permitía “restringir la libertad y movilidad de las personas, a través de medidas como cuarentenas, cordones sanitarios y toques de queda”, dijo al anunciar la medida.
Debido a esta medida, las Fuerzas Armadas realizaron tareas de control y fiscalización en el toque de queda nocturno, cuyo horario varió según la evolución de los contagios en los territorios.
Chile registra actualmente una media de 500 casos nuevos y una docena de decesos al día por el covid, acumulando más de 1.6 millones de contagios y 37,000 muertes desde el 3 de marzo de 2020.
Según las autoridades, para autorizar la nueva medida influyó el rápido avance de la vacunación y la colaboración de la ciudanía.
En el país, 13.4 millones de los 19 millones de habitantes del país están vacunados y el 14 de septiembre comenzó la inmunización en niños de los seis a los 11 años de edad.
Los infantes deben contar con la autorización por escrito de sus padres, ya que la vacunación será en las escuelas para evitar los centros públicos.
El plan es vacunar a los alumnos del primer ciclo educativo, cerca de 1.5 millones, en diciembre. En promedio, el 84% de los jóvenes de 12 a 17 años ya recibió la primera dosis.
/Con información de agencias/