Por Notimex LONDRES.- El primer ministro británico Gordon Brown hizo hoy una severa advertencia a los bancos, demandando que apliquen a sus clientes el recorte de tasas de interés de un punto porcentual dispuesto el jueves por el Banco de Inglaterra. El Banco de Inglaterra redujo el jueves su tasa de interés clave de tres a dos por ciento -su nivel más bajo desde 1951-, después de una sorpresiva reducción 1.5 puntos en noviembre. "Pienso que los bancos deben pasar realmente (a sus clientes) el recorte a la tasa de interés. Ya estamos hablando con los bancos", dijo esta mañana Brown, citado por el diario The Times en su página electrónica. "Recordemos que la última vez que hubo un recorte tuvimos que hablarles antes de que (el recorte) fuera pasado, y les hablaremos nuevamente", abundó. Hasta ahora sólo Lloyds TSB, HSBC y Woolwich han prometido reducir sus tasas variables estándar. Sin embargo, Halifax, que es parte de HBOS, el banco que está siendo rescatado con dinero de los contribuyentes por medio de una fusión con Lloyds TSB, ha recortado su tasa variable en apenas un cuarto de punto. Un prestatario con un crédito de 150 mil libras (218 mil dólares) que paga la tasa de Halifax verá sus pagos reducirse en sólo 25 libras (36 dólares) al mes. Previamente esta semana, el discurso de la Reina delineó planes que podrían ver a los bancos multados y sus activos congelados si no tratan de forma justa a sus clientes en caso de que el actual código de conducta voluntario para prestamistas se vuelva obligatorio. Este año el gobierno ha rescatado con dinero de los contribuyentes a HBOS, Lloyds TSB y Royal Bank of Scotland con 37 mil millones de libras (54 mil millones de dólares) después de nacionalizar al banco hipotecario Northern Rock, que está pagando un préstamo de emergencia por 25 mil millones de libras (36 mil millones de dólares). El mes pasado los principales bancos del Reino Unido fueron invitados a una reunión con el ministro de Finanzas, Alistair Darling, quien los instó a pasar a sus clientes el total del recorte de 1.5 puntos dispuesto por el Banco de Inglaterra en noviembre. Muchas instituciones financieras fueron criticadas por demorarse o no pasar a sus clientes el recorte completo.