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El director general de GEA, Ernesto Cervera, destacó que el financiamiento con el FMI y la línea swap con la Reserva Federal de Estados Unidos ayudarán a respaldar los créditos que empresas mexicanas deberán pagar en el extranjero este año
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Por Notimex CIUDAD DE MÉXICO.- El director general de GEA, Ernesto Cervera, destacó que el financiamiento con el FMI y la línea swap con la Reserva Federal de Estados Unidos ayudarán a respaldar los créditos que empresas mexicanas deberán pagar en el extranjero este año, por unos 30 mil millones de dólares, como CEMEX, VITRO y GRUMA. Además, permitirá a México tener la suficiente cantidad de dólares para respaldar el déficit de este y el próximo año, y solventar el proceso de recuperación que iniciará en 2010, afirmó el titular de Grupo de Economistas y Asociados (GEA). Al dictar la conferencia "Crisis financiera internacional y sus efectos en México", organizada por Pronafim, Cervera precisó que la crisis ha propiciado una recesión generalizada en México, en donde 16 de las 21 ramas manufactureras ya muestran contracciones. En ese sentido, estimó que la economía mexicana caerá 2.8 % este año, pero podría empezar a registrar un crecimiento a partir del primer trimestre de 2010. La demanda interna, que podría contraerse 2.5 % este año, dejará de ser el motor de crecimiento del país, a la vez que el sector industrial descenderá 4.6 % y el de servicios 1.1 %. En ese sentido, pronosticó que el Indice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) cerrará el año en 4.8 % y el tipo de cambio en 14.50 pesos por dólar. El deterioro más importante de las cuentas externas de 2009 será la balanza petrolera, ya que el precio promedio del petróleo se ubicará en 40 dólares por barril, subrayó. Estos se ha traducido en una contracción sensible del crecimiento de la masa salarial de los trabajadores formales del país, lo que ha impactado en la caída en la confianza del consumidor, la cual se encuentra igual de deteriorada que en Estados Unidos. Finalmente, Cervera destacó que entre los desafíos que enfrentará la economía mexicana en 2010 se encuentran el mantener un tipo de cambio flexible, un presupuesto público balanceado, una política monetaria autónoma y expandir la apertura comercial.