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Autoridades, inmobiliarios y empresarios, coincidieron en que hay en puerta varios proyectos inmobiliarios en la zona de Cancún, Quintana Roo, que se encuentran en pausa debido a la situación política y las decisiones que se tomen en el tema comercial entre México y Estados Unidos.

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Javier Zubirán Padilla, titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano (SEDU) en la entidad, dijo que los proyectos que se encuentran aplazados en trámites, son de diversa índole, desde desarrollos condominales hasta fraccionamientos de vivienda de interés social, pues aún no hay claridad sobre el comportamiento de los precios internacionales de diversos insumos para la edificación.

Consideró además que los desarrolladores abrirán un compás de espera y dependiendo de las condiciones de mercado, ellos eventualmente tomarían la decisión de edificar, pero dependerá de cómo se conduzcan en las próximas semanas las negociaciones entre las administraciones de México y Estados Unidos.

En el mismo sentido, Ramón Abascal, representante en Quintana Roo de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (AMPI) destacó que las inversiones para este año aún se encuentran en stand-by hasta que no haya suficiente claridad en la relación comercial bilateral.

Dijo que hay cautela en el sector de la construcción y las inversiones turístico-hoteleras, ya que la volatilidad en los mercados por las elecciones presidenciales en Estados Unidos hace imposible anticipar qué consecuencias podría haber en el sector inmobiliario.

Insistió que no se puede hablar de cancelación de inversiones, sino de un ambiente de cautela generalizada entre los inversionistas.

Beatriz Muñoz, también consejera de la AMPI, informó que durante 2016, Cancún y la Riviera Maya presentaron un alza en la venta de productos residenciales plus, con lo que se pudieron comercializar 800 unidades en ese periodo.

Finalmente, Miguel Ángel Lemus, ex dirigente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) en Cancún, y desarrollador de tres proyectos condominales de lujo en Cancún, manifestó que, si bien hay indecisión en el sector, también hay una coyuntura positiva por el tipo de cambio que favorece de manera considerable las inversiones estadounidenses en México, por lo que consideró “espléndidamente barato” adquirir una propiedad vacacional en Cancún u otro polo turístico nacional.