El sector inmobiliario observa cambios en su oferta y demanda, debido a las medidas de distancia social y confinamiento que trajo la pandemia del nuevo Coronavirus. Ante esto, los precios de las propiedades en 2020 podrían aumentar de acuerdo a distintos factores, una vez pasada la contingencia. A continuación se mencionan algunos:

-Espacio y adaptabilidad: La posibilidad de acondicionar espacios para realizar Home Office y educación remota dentro de la vivienda o departamento se ha convertido en una característica muy valiosa; por lo que en el futuro, el precio de las viviendas con espacios amplios y habitaciones extra que puedan convertirse en estudios u oficinas se verá incrementado.

-Espacios recreativos privados: Ya que en los conjuntos habitacionales se ha restringido el uso de las áreas comunes como canchas, albercas y áreas de juegos, así como en los espacios públicos como parques, cines o centros deportivos, los espacios privados de esparcimiento dentro de la vivienda se volverán un gran atractivo en el futuro inmediato. Casas y departamentos con jardines, cuartos de juego, gimnasios, balcones o terrazas se volverán muy solicitados.

-Buena ubicación: La ubicación siempre ha sido un factor importante al determinar el precio de inmuebles, y con las medidas de confinamiento, esto se ha maximizado. Los servicios básicos como agua y electricidad son ahora más importantes que nunca, por lo que las viviendas capaces de recibir estos servicios de forma permanente y estable ganarán atractivo contra aquellas que no. La crisis sanitaria también ha generado la necesidad de vivir cerca de centros de salud, supermercados o farmacias, por lo que el precio de propiedades en 2020 y 2021 podría aumentar.

-Buena conectividad: El internet, junto con la telefonía y televisión por cable, además de la buena conexión por vía terrestre para las entregas a domicilio, se han vuelto indispensables para la comunicación y entretenimiento, por lo que las viviendas con buena recepción de estos servicios serán más atractivas para los compradores, incrementando su demanda y por consecuencia, sus precios.

-Viviendas alejadas de los centros urbanos: Existe la posibilidad de que un sector de los compradores opte por viviendas alejadas de las grandes concentraciones urbanas, sobre todo si adoptan de forma permanente el esquema de trabajo remoto y para protegerse ante una crisis sanitaria como la actual. Y a pesar de ello, buscarán estar rodeados de escuelas, hospitales y centros recreativos, aunque con poca afluencia de personas. Estas características las reúnen las casas y departamentos en desarrollos privados, por lo que el incremento en la demanda de estas por compradores de economía media-alta y alta generaría un alza en sus precios.