Después de dos meses de caídas interanuales, los precios de las viviendas en Estados Unidos aumentaron en agosto (+0.7%) a medida que el número de unidades en el mercado disminuyó por segundo mes consecutivo, una caída interanual del -7.9 por ciento.
Lo anterior se desprende del 'Informe mensual de tendencias de vivienda de agosto' de Realtor, el cual indicó que el inventario activo se mantuvo -47.8% por debajo de los niveles típicos del 2017 al 2019, aunque este 2023, un aumento fuera de temporada en las viviendas recién listadas de julio a agosto (+3.5%) ofrece más opciones para los compradores de viviendas a medida que se acerca la temporada de compras de otoño.
"Si bien el aumento en las nuevas propiedades en venta es una buena noticia para los compradores de viviendas, el inventario sigue siendo persistentemente bajo, incluso con tasas hipotecarias récord que frenan la demanda", comentó Danielle Hale, economista jefe de Realtor.com.
En su opinión, la crisis de inventarios continúa ejerciendo presión al alza sobre los precios de las viviendas, amplificando las preocupaciones sobre la asequibilidad y dejando fuera del mercado a algunos compradores potenciales. Sin embargo, anticipa que las tasas hipotecarias disminuirán gradualmente hasta fin de año y, a pesar del aumento de los precios de este mes, es poco probable que se vea un nuevo pico de precios este año.
¿Qué significa para los compradores, vendedores y el mercado inmobiliario?
Aunque los vendedores de viviendas estuvieron menos activos en agosto en comparación con el año pasado, el aumento de las unidades recién puestas a la venta de julio a agosto crea un buen impulso para los compradores al acercarse el otoño, que normalmente es el mejor momento para comprar una casa. Los propietarios de viviendas que han estado indecisos sobre la venta probablemente encontrarán compradores ansiosos que busquen nuevos listados.
Para Clare Trapasso, editora ejecutiva de noticias del sitio inmobiliario, a medida que se intensifica la actividad de compra de otoño, no es probable que las nuevas casas disponibles para la venta permanezcan en el mercado por mucho tiempo, por lo que los vendedores y compradores potenciales deberán estar preparados para actuar rápidamente.
La asequibilidad sigue siendo una preocupación importante. Aunque las ventas de viviendas nuevas están aumentando, la actividad de la construcción no es lo suficientemente sólida como para compensar la escasez de inventario y aliviar los precios, que han subido casi 38% desde los niveles de agosto de 2019.
En agosto, los precios de cotización de las viviendas en Estados Unidos aumentaron ligeramente en comparación con el 2022, poniendo fin a una racha de dos meses de caídas de precios año tras año en junio y julio, impulsadas por un escaso inventario de viviendas en venta en todo el país.
A pesar de que los precios de cotización fueron ligeramente más altos que en agosto del año pasado, es poco probable que el precio de lista medio supere el récord del año pasado de $449 mil dólares en junio de 2022 a medida que se acercan los meses de otoño y cuando los precios de las viviendas suelen experimentar una ligera caída estacional.
“Si bien todas las regiones vieron aumentar en promedio los precios de cotización en las áreas metropolitanas más grandes, las áreas metropolitanas del Noreste tuvieron la tasa de crecimiento más alta en los precios de cotización activa, con un aumento promedio de 9.7% durante el año pasado”, señala el estudio.
Entre las 50 áreas metropolitanas más grandes de EU, solo 7 vieron disminuir su precio de lista medio en comparación con esta misma época el año pasado, frente a 12 el mes pasado. Las mayores caídas de precios año tras año se observaron en Raleigh (-4.6%) y Las Vegas (-2.8%). Las áreas metropolitanas más grandes del Sur experimentaron la tasa de crecimiento de precios de cotización más baja entre las regiones (3.2%).
La proporción de viviendas con reducciones de precios disminuyó a nivel nacional de 19.3% en agosto del 2022 al 16.2% este año, y se mantiene por debajo de los niveles típicos observados entre el 2017 y 2019.
Entre las 50 áreas metropolitanas más grandes, los mayores aumentos en el porcentaje de viviendas con reducciones de precios en comparación con el año pasado se observaron en San Antonio (+3.9 puntos porcentuales), Memphis (+3.7) y Oklahoma City (+1.9).
