A pesar de su corta vida, y de que su producción como artista no haya abarcado más de una década, Gordon Matta Clark (1943-1978) fue una figura clave en la generación de artistas y arquitectos posteriores al minimalismo. Estuvo en el centro de los debates en torno a las prácticas artísticas de los año décadas de 1960 y 1970: estrategias de producción en sitio específico, arte procesual, arte conceptual.
Estudió arquitectura en Cornell y Literatura Francesa en la Sorbona; fue hijo del surrealista de segunda generación Roberto Echaurren Matta (1911-2002), pionero en la transformación del SoHo neoyorkino en vecindario de artistas, bailarín nato y dionisiaco, fundador del restaurante Food y con ello de la modalidad, ahora afamada, del restaurante de artista.
Gordon Matta-Clark working on the house.
Para la historiografía del arte contemporáneo el trabajo de Matta-Clark representa el inexorable problema de la inaccesibilidad a la obra. Imaginemos el caso de Splitting: Nueva Jersey, primavera de 1974. Se trata de una casa abandonada en los suburbios a la espera de ser demolida. Pero antes que eso suceda Gordon Matta-Clark, con una sierra de cadena como su principal herramienta, ejerce dos cortes paralelos y verticales en el centro de la casa. Quitando bloques de los cimientos ambas partes de la casa se inclinan, literalmente se ladean. Tanto la fachada exterior como la estructura interior son serruchadas, marcos de puertas y ventanas, escaleras y todo lo que está al paso se abre a canal. Meses más tarde esta casa es demolida quedando de la obra los restos, los residuos, registros de la acción del artista: fotografías, videos y documentos.
Pocos tuvieron la suerte de vivenciar un espacio que atenta contra toda figura gestáltica que pudiera establecer la razón, y no sólo ella, sino también la intencionalidad propia del cuerpo hacia el mundo y su manera de desplazarse en él. Los testimonios refieren a sensaciones inauditas de vértigo, miedo y a la imposibilidad de establecer una escala mediante el propio cuerpo con el espacio.
Splitting 10 & 11
Lo medular en el trabajo de Matta-Clark es el aspecto vivencial de la obra. Imagine usted la inadecuación de su cuerpo con el espacio como sucede en las obras Office Baroque o Circus, cuando al abrir la puerta de una habitación para acceder al cuarto contiguo se dé cuenta de que no hay piso o que un segmento de la pared ha sido sustraído, o bien que la esquina superior de la habitación ya no está. Así es, el ángulo de intersección de las dos paredes con el techo funciona ahora como tragaluz, violentando la noción de protección y seguridad que supone la estructura arquitectónica. Asomarnos por debajo de nuestros pies es mirar en caída libre el esqueleto de la construcción sobre la que estamos parados. Nuestra posicionalidad es aún más incierta cuando advertimos que la luz penetra por arriba, por abajo y por ambos lados. El espacio escudriña nuestra orientación y equilibrio.
Tina Girouard, Carol Goodden, and Gordon Matta-Clark in front of the food restaurant, prince street en wooster street, nex york.
La verticalidad como sistema sinérgico que da dirección de simetría entre nuestro cuerpo y el mundo, es decir, La verticalidad como anclaje al mundo, tiene que ser negociada a cada paso. Todo comienza por el cuerpo y todo acaba ahí. La confianza que la arquitectura genera, con sus espacios claramente confinados y delimitados como interioridad-exterioridad, en el trabajo de Gordon Matta-Clark es simplemente socavada.
Hair 1972.
Cortar, seccionar, serruchar, trozar, desbastar, partir, dividir, fragmentar… No podemos negar que en el fondo del trabajo de Matta-Clark subyace una estética de la violencia. Y que ésta genera en el espectador una desarticulación en su campo fenomenal. Incluso, interpretaciones en torno a su obra refieren a la violencia viril con la que es lacerado el reino de lo femenino, por la asociación doméstica de la casa. El imaginario aislacionista de la casa como contenedor es desestabilizado mediante su fractura real. Y con ello lo que la obra de Gordon Matta-Clark pone en tensión, en todo caso, son nociones fundamentales al orden social, como: lo público y lo privado, lo urbano y lo suburbano, la propiedad y la apropiación, el centro y la periferia. Las intervenciones realizadas en edificios, casas, hangares y todo tipo de estamentos urbanos que recorrieran en declive la pendiente del consumo, el desarrollo y el crecimiento, dan cuenta de una lógica del progreso que sacrifica su propia producción en aras de seguir desarrollándose. Suburbios, barriadas y sitios abandonados mediante su destrucción vuelven a ser puestos en funcionamiento según la especulación del mercado.
Untitled 1973
Gordon Matta-Clark and friends acting for tree dance on vassar college