El ajuste al presupuesto federal de 2015 y la previsión para 2016 afectó a diversos proyectos de infraestructura que incluso fueron cancelados a principios de este año.
El presupuesto 2016 no mostrará cambios positivos respecto al año previo, por lo cual se buscará a través de la iniciativa privada una mayor participación de capital para empujar más obras del sector.
Aunque aún está por terminar de definirse la asignación de recursos públicos en el Congreso de la Unión para el presupuesto 2016, se reduce el gasto casi 2 por ciento.
El gasto neto total del sector público propuesto para 2016 asciende a 4.7 billones de pesos (bdp), lo cual corresponde una disminución en términos reales de 1.9% respecto al ejercicio fiscal de 2015. Cabe destacar que el gasto programable se reduce en 5.9% en términos reales respecto a lo aprobado para 2015 y se estima que el gasto no programable podrá observar una tasa de crecimiento de 12.2 por ciento.
De esta manera, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) cumple con el compromiso de reducción de déficit. La SHCP propone un déficit equivalente a 0.5% del PIB para 2016, menor al 1% presupuestado para 2015.
Dentro del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) 2016, el monto previsto para la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) será de 97,482.7 millones de pesos (mdp), esto representa un 25.1% menor al que recibió el año anterior.
De dichos recursos, se tiene contemplado destinar 25,654 mdp para la construcción de carreteras, es decir, 905 mdp superior a lo que se aprobó para 2015, con lo cual se modernizarán 609.1 km de la red federal.
Por lo que respecta a la asignación para el transporte aéreo, los recursos serán de 5,725 mdp, en este monto se incluye la construcción de la primera fase del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), que tuvo un recorte presupuestal de 1,371 mdp.
Otra de las áreas a la cual disminuyeron el presupuesto es la de infraestructura ferroviaria 2016, para lo cual se tiene contemplado se le otorguen recursos por 19,232 mdp, es decir, 6,890 mdp menos que en 2015.
En opinión de SHCP, los proyectos determinantes para el desarrollo del país se encuentran asegurados y no se verán afectados.
Éste es el caso del NAICM, cuya inversión asciende a 9,650 mdp para 2016.
Otros proyectos prioritarios, como el Tren Interurbano de Pasajeros Toluca-Valle de México, también conocido como Tren Interurbano México-Toluca, el Tren Eléctrico Urbano o tren ligero, en Guadalajara, la ampliación de la Línea A del Metro que irá de Los Reyes La Paz a Chalco y el tren Chiapas-Mayab, mantienen su presupuesto de acuerdo con la SHCP.
La explicación oficial es que se están agilizando los proyectos de prioridad económica y social en este entorno de escasez, por lo que en el futuro si mejora la disponibilidad de recursos, el gobierno les podrá ir asignando a aquellos proyectos que estén listos.
Si bien por una parte los recursos asignados directamente por el ejecutivo a través de la SCT afectarán la inversión en proyectos de infraestructura, también los que llegan a través de los estados sufrirán una reducción. Derivado de ello el PPEF 2016, propuso que el monto destinado a los estados por convenios y otras transferencias sea de 249,200 mdp, lo que representa una disminución de 23.58 por ciento.
Al respecto, la calificadora Moody’s señaló que con esta reducción, algunos estados podrían ver afectada su calificación crediticia debido a que estos recursos son los que se usan para proyectos de infraestructura: “bajo la actual propuesta, el sector podría presentar un marcado deterioro en su liquidez o un crecimiento en los niveles de endeudamiento”.
Los expertos de Moody’s destacaron que la menor inversión y desarrollo en materia de infraestructura en el corto plazo tendrá impacto directo en la generación de empleo, mientras que en el largo plazo afectará directamente a la competitividad de los estados.
Asociaciones público privadas: el salvavidas
Como estrategia para contrarrestar los recortes al presupuesto en materia de gasto de inversión en el sector de infraestructura, el PPEF incluyó una inversión de 11,500 mdp para proyectos bajo la Ley de Asociaciones Público Privadas (APP).
El PPEF contempla la construcción del libramiento La Galarza-Amatitlanes en Puebla, dos contratos de conservación para la carretera Querétaro-San Luis Potosí y Coatzacoalcos-Villahermosa. El monto destinado para estos proyectos es de 4,708 mdp.
Además, la construcción de cuatro hospitales regionales en García, Nuevo León; Tapachula, Chiapas; Bahía de Banderas, Nayarit y Tepotzotlán en el Estado de México. La inversión destinada a este rubro es de 6,068 mdp.
En este sentido, Gustavo Arballo, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), señaló: “Hay interés del sector privado por participar en las obras de infraestructura que se van a hacer en los próximos años, ahora como estamos teniendo un recorte presupuestal en ciertas dependencias se tiene que recurrir a este esquema para que las obras de infraestructura puedan realizarse”.
Ligado a lo anterior, la CMIC trabaja con diversas dependencias para la creación de un banco de proyectos que podrían desarrollar las asociaciones público privadas. Este nuevo mecanismo es una buena alternativa para la construcción de infraestructura, aunque se debe tener cuidado de no convertirlas en deuda pública simulada, por lo que los expertos consideran que es necesario dejar claras las fuentes de pago al sector privado y el tipo de participación que se tendrá en algún proyecto.
Visto de otra manera, para que tengan éxito, la certeza jurídica es un tema esencial para las empresas privadas que están interesadas en participar.
Texto:Jesús Arias
Foto: ferromex, gob mx, mexiport, trrsf