Uno de los principales objetivos del acuerdo para este año, es destinar un importante monto de recursos en proyectos ubicados en estados rezagados en términos de desarrollo económico; la mayoría de ellos en la región Sur-Sureste del país.
Del plan de inversión inicial, por 859 mil 22 millones de pesos (mdp) que realizará la Iniciativa Privada (IP) durante los cinco años que faltan del sexenio en todo el país, contempla 147 proyectos; 28.6% de estos concentrados en la región anteriormente mencionada. Cabe señalar que el mecanismo de implementación del acuerdo incorporará nuevos proyectos y agilizará su ejecución.
En particular, el programa inicial del acuerdo considera 42 proyectos para los estados que conforman el Sur-Sureste, con inversiones asociadas de 137 mil 302 mdp entre carreteras, puertos, aeropuertos, energía y turismo. Dicho monto representa el 15.98% de la inversión total señalada para todo el país.
Con base en el Acuerdo Nacional de Inversión en Infraestructura del Sector Privado, se dividió al país en tres regiones: Norte, Centro y Sur-Sureste; éste último comprende los estados de Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Veracruz, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
De los 147 proyectos contemplados inicialmente, la distribución se hizo de la siguiente forma:
- Región Centro: Concentra 45 proyectos y una inversión de 268 mil 548 mdp.
- Región Norte: Contempla un presupuesto de inversión de 196 mil 701 mdp para 49 proyectos.
- Región Sur-Sureste: Se desarrollarán, en una primera etapa, 42 proyectos que contarán con una inversión de 137 mil 302 mdp.
- Multirregión: Adicionalmente, existen 11 proyectos multirregión que concentran 256 mil 471 mdp.
En particular, en el Sur-Sureste, de los 42 proyectos, 32 forman parte del sector transportes con una inversión total de 60 mil 738 mdp: 14 carreteros (24 mil 023 millones); nueve puertos (22 mil 706); y nueve de aeropuertos (14 mil 9).
Los otros siete son parte del sector turismo, para el que se destinaron 52 mil 364 millones de pesos.
Proyectos emblemáticos
Desde su campaña electoral, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hizo público que entre los proyectos de infraestructura más emblemáticos de su administración, destacarían el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, el Tren Maya y la refinería de Dos Bocas, todos ellos ubicados en el Sur-Sureste.
El primero de estos proyectos incluye la rehabilitación y modernización del ferrocarril del Istmo, modernización de carreteras primarias y secundarias, fortalecimiento de la red aeroportuaria, instalación de fibra óptica, modernización de los puertos de Coatzacoalcos, Veracruz y Salina Cruz, en Oaxaca. También la creación de una zona franca, diez parques industriales y un gasoducto. En total, una inversión de aproximadamente 250 mil millones de pesos.
El objetivo de este proyecto es la articulación de un corredor transístmico multimodal, como un enlace interoceánico terrestre entre el Pacífico y el Atlántico, vía el Golfo de México. Se uniría en la parte más estrecha del territorio mexicano, desde el puerto de Salina Cruz, a Coatzacoalcos, Veracruz.
Analistas consideran que este megaproyecto sería el que mayor impacto tenga en la región, no solo por la inversión señalada y la generación estimada de 70 mil empleos, sino porque lograría impulsar y diversificar la economía de la región al detonar algunos encadenamientos productivos, e impulsar el potencial eólico, hidroeléctrico y geotérmico de las entidades.
Se trata de un sueño histórico que data de la época de Porfirio Díaz: El crear un gran hub logístico que pueda capitalizar la estratégica posición geográfica del país para ser como una puerta de entrada o enlace entre Estados Unidos, Europa y Asia. Esta propuesta se convertiría en una alternativa para ir del Golfo de México al océano Pacifico sin necesidad de ir hasta el Canal de Panamá.
El plan contempla, en toda su longitud, la instalación de factorías, un nuevo impulso petrolífero vía Campeche, Tabasco y Chiapas; además de la logística industrial que se promueve desde Yucatán y del inicial proceso de industrialización que emerge desde Quintana Roo, a partir del Parque Industrial con Recinto Fiscalizado Estratégico, ubicado en la ciudad de Chetumal.
Inversión histórica
Para el Tren Maya se prevé una inversión de hasta 150 mil mdp y de 8 mil millones de dólares (mdd) para la nueva refinería de Dos Bocas.
Si bien no son los únicos proyectos que se desarrollarán dentro de la región, sí son de los más emblemáticos, que sumarían a una inversión pública y privada de más de 500 mil mdp a lo largo del sexenio, la cual impactaría de manera positiva al ser un monto histórico.
Como cifra comparativa, en la administración de Enrique Peña Nieto, en cinco de los estados del Sur-Sureste (Campeche, Chiapas, Oaxaca, Tabasco y Yucatán), se invirtieron 92 mil mdp en infraestructura carretera, portuaria, ferroviaria y de telecomunicaciones; cifra que, en ese momento, fue sin precedentes en el sector de comunicaciones y transportes. Lo anterior, con base en información que hizo pública al final de la administración pasada el entonces secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza.
El Acuerdo Nacional de Inversión en Infraestructura, es descrito como “una herramienta para facilitar y acelerar la implementación de proyectos que contribuyan al crecimiento y desarrollo del país”.
Todo apunta a que el Sur-Sureste de México logrará una inversión nunca vista dentro de la región en materia de infraestructura, con proyectos que pueden ser detonadores para la región más rezagada del país.
Texto:Jesús Arias
Foto: SSA MEXICO / prosmotrov