México cuenta con la regulación, los productos, la escala, tecnología y control de riesgos necesarios para integrar el mercado financiero de manera efectiva. Puede atender a diversos clientes, desde habitantes de la Sierra de Oaxaca que caminan horas para arribar a un banco, hasta algunos de los hombres más ricos del mundo. También, hay intermediarios financieros para MiPymes y otros, como Banobras, que otorgan créditos billonarios para infraestructura.
La combinación de reformas estructurales, el crecimiento del sector Sofom, fintech, la integración de mercados y la atracción de inversiones internacionales posicionan a México como un candidato ideal para convertirse en un hub financiero de América Latina y uno de los más importantes en el mundo. Con una infraestructura robusta, talento calificado y un entorno regulatorio en evolución, México está preparado para asumir un papel de liderazgo internacional.
Históricamente México fue un centro financiero de América y el mundo. En la Colonia se acuñaban las monedas del planeta en México; en el siglo XVIII el primer intermediario financiero de las Américas nace aquí, con el Monte de Piedad; en los años 1800 aparecen los bancos y en los 1900 asumen un rol muy importante, tomando las lecciones aprendidas en otras partes del mundo; en el siglo XXI surgen las Sofomes y otros intermediarios financieros que hacen que México sea muy robusto en su número de intermediarios financieros no bancarios.
Hoy en día las Instituciones de Banca Múltiple están muy capitalizadas, y han demostrado solidez incluso en situaciones como la pandemia, situación que ha sido aplaudida en muchas latitudes y que ha mejorado la cara de nuestras instituciones en el mundo.
México está en crecimiento, y las MiPymes, emprendedores y Pymes representan el 99.8% de los establecimientos al cierre de 2019, siendo el mayor nicho que debemos apoyar en el sistema financiero. Aunque no todos los intermediarios financieros pueden otorgarles crédito debido a normas internacionales, las Sofomes han adaptado fórmulas de financiamiento para estos negocios, mitigando riesgos según la realidad del sector. El 60% de las Pymes obtienen su primer crédito gracias a una Sofom.
Por último, la capa más sexy para una empresa es colocar sus valores de deuda o sus acciones en Bolsa, hoy México cuenta con dos bolsas de valores, BMV y BIVA, que, en conjunto con la SHCP, Banxico, CONDUSEF, la CNBV y algunos consultores especializados, han mejorado sustancialmente la regulación y plataforma, que podrá soportar el crecimiento y la necesidad de financiamiento de la industria y los servicios en las siguientes décadas. Democratizando las inversiones en miras a una prosperidad compartida, siguiendo las ideas de la presidenta electa Claudia Sheinbaum y Altagracia Gómez.
En prevención de lavado de dinero, estamos en una posición media alta a nivel internacional, aunque en anticorrupción nos ubicamos en la parte media baja. Nuestro sistema de pagos, como el SPEI, ha ganado premios mundiales. Además, contamos con una buena capacidad digital y una sólida infraestructura de telecomunicaciones, con alta penetración de teléfonos celulares, facilitando el éxito de los modelos fintech. Instituciones como BBVA y Banorte han demostrado que es posible manejar un alto volumen de operaciones con una arquitectura IT adecuada y una amplia red de sucursales.
Hace décadas experimentamos el nearshoring financiero, y aún hay espacio para crecer, con México como la joya de grandes grupos financieros internacionales. Hoy, los intermediarios financieros deben utilizar su Know How para ayudar al mundo y aceptar su papel en una potencia financiera. Los bancos mexicanos, por ejemplo, podrían otorgar créditos a países y empresas en LATAM, financiándose con emisiones en nuestros mercados reconocidos. Así, México podría recuperar el liderazgo en materia financiera que tuvo durante la Colonia.
Es importante recordar las condiciones internacionales. Durante el siglo XX, el sistema financiero global se basaba en gran medida en la confianza y la confidencialidad. Sin embargo, en el siglo XXI, la confidencialidad ya no es una realidad debido a la transparencia fiscal que impera en la actualidad. Lo que solía ocurrir en Panamá, las islas del Caribe y otros paraísos fiscales ha cambiado; por ejemplo, Suiza ha tenido que modificar su fórmula de negocios y su mentalidad para adaptarse a las exigencias del siglo XXI.
Contamos con gran transparencia fiscal e intercambio de información. Contar con CRS y FATCA (que tienen como referencia la Ley de Cumplimiento Fiscal de Cuentas Extranjeras) ayudan a México para que fiscalmente estemos muy bien, es decir, tenemos buenas reglas al grado de que en el más reciente ranking del Doing Business estamos en el lugar 60 de 190 en la tabla general.
Insisto en que en la parte financiera México debería hacer mucho más, sin contar al mercado interno que es enorme; por ello, considero que hay que seguir apoyando para acceder a más recursos internacionales. Por ejemplo, somos el número 1 de fideicomisos en el mundo y por eso hay que aprovechar la potencia que tenemos.
Reforma del sector financiero
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) trabaja en una reforma integral del sector financiero con el objetivo de colocar a México en una posición de liderazgo regional. No solo busca hacer crecer el sector, sino también hacerlo más dinámico y accesible. Entre los esfuerzos destacados está la colaboración con actores clave del sector financiero, incluyendo la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) y la Bolsa Institucional de Valores (BIVA), para impulsar la integración y expansión del mercado bursátil.
Fintech
Uno de los pilares para posicionar a México como un hub financiero es el desarrollo del sector fintech. La reactivación del Grupo de Innovación Financiera es una de las estrategias para fomentar la innovación, sostenibilidad, educación e inclusión en los servicios financieros digitales. México cuenta con el talento y la infraestructura necesarios para ser un líder en fintech, y la colaboración entre fintechs y bancos tradicionales está creando soluciones híbridas que benefician a un amplio espectro de usuarios.
Mercado de Valores 2023
La reciente reforma a la Ley del Mercado de Valores (LMV), publicada en el Diario Oficial de la Federación en diciembre de 2023, es un avance significativo para consolidar a México como un hub financiero. Esta nueva ley busca aumentar la liquidez, fomentar el crecimiento empresarial y facilitar el acceso al financiamiento. La simplificación de las ofertas públicas permitirá que tanto grandes empresas como Pymes puedan obtener financiamiento de manera más accesible, lo que a su vez atraerá a inversionistas internacionales interesados en aprovechar las oportunidades que ofrece México, especialmente en el contexto del nearshoring.
Integración global
México es parte del Mercado Integrado Latinoamericano, junto con Colombia, Chile y Perú, lo que facilita la integración regional de los mercados bursátiles. Además, el Sistema Internacional de Cotizaciones (SIC) permite la integración a escala global, conectando a México con mercados de Centroamérica y la Alianza del Pacífico.
Si pensamos que hay inversiones anunciadas por más de 100 mil millones de dólares, que en términos de infraestructura tenemos que financiar ciudades, parques industriales, trenes, puertos, aeropuertos y carreteras, agua, electricidad, hidrocarburos, entre otras, el sistema financiero tiene un gran reto por lo que es fundamental alinear a la sociedad, autoridad y a los inversionistas.
A manera de conclusión, veo que la geopolítica o geologística, de la mano con la capacidad de su población calificada, con la gran plataforma legislativa que cuenta, las diversas oportunidades que tienen las Pymes, infraestructura, nearshoring, turismo y el agro, todo ello está colocando a México en el centro del mundo. Sin duda, hay que promover lo que somos y lo que podemos ser en el futuro.
Texto:Adolfo González Olhovich, presidente de TMSourcing
Foto: REM