Kansas City Southern (KSC), contempla dos escenarios ante la suspensión de la industria automotriz en Norteamérica durante el segundo trimestre de 2020 (2T20), así como una baja de entre 15 y 30 por ciento en sus ingresos aunado de la suspensión de operaciones de plantas armadoras de automóviles en México y Estados Unidos por el COVID-19.
Mike Upchurch, director de finanzas de la firma, explicó en conferencia que el primer escenario podría suponer una disminución aproximada de 15% en los ingresos del 2T20, a la par de una reducción anual de aproximadamente 10 y 5 por ciento durante el tercer y cuarto trimestre del año, respectivamente.
El segundo, supone una disminución todavía más dramática de 30% en el segundo trimestre, lo que supondría el peor trimestre de KSC desde la gran recesión de 2009; lo que estaría seguido por caídas de 10 y 5 por ciento para el tercer y cuarto trimestres.
Sin embargo, mencionó que ninguno de los escenarios representa un pronóstico específico para el resto del año, sino que simplemente son supuestos de planificación, pues “no podemos predecir o controlar con precisión lo que sucede con los volúmenes y los ingresos en este momento durante la crisis de COVID-19”.
Por otra parte, Mike Upchurch hizo hincapié en la capacidad de la compañía para ajustar el tamaño de su estructura en costos, ya que aproximadamente el 60% de esta es variable o semivariable; el resto (40%) es de naturaleza fija.
Al primer trimestre de 2020 (1T20), Kansas City Southern, reportó ventas por 731.7 millones de dólares, es decir, 8% superior a lo registrado en el mismo periodo un año anterior; pero, si bien los ingresos del sector automotriz registraron una baja del 6%, estos fueron compensados por los aumentos del 18% en transporte de combustibles, y 9% en minerales y alimentos.
/Con información de El Financiero./