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El gobierno de la Ciudad de México planea una reducción de afluencia, así como una supervisión en plazas comerciales y en la reinstalación de puestos en la vía pública.

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Para la reapertura del Centro Histórico, el gobierno de la Ciudad de México planea una reducción de afluencias, y supervisión en las plazas comerciales y en la reinstalación de puestos en la vía pública; asimismo, un esquema de flujos vehiculares con calles compartidas y otras con acceso controlado. En el primer aspecto, las aceras de ambos lados tendrán espacios para dosificación de acceso y filas; además, de maximizará el espacio de circulación.

Y los locales con números pares abrirán los lunes, miércoles y viernes; y los nones los martes, jueves y sábados. Todos deberán trabajar de 11:00 a 20:00 horas; los domingos la emblemática zona permanecerá cerrada, informó Dunia Ludlow, coordinadora general de la Autoridad del Centro Histórico.

Y comentó las calles con más afluencia, que pongan en riesgo la salud, se cerrarán y se implementarán mecanismo de dosificación en las avenidas Madero y Corregidora; cuando se establezca el color naranja del semáforo epidemiológico; señaló El Universal.

También se crearán macromanzanas, en las que se definirán vías estructurales de tránsito vehicular y una zona interior peatonal, con filas en banquetas y circulación peatonal en el arroyo vehicular; dijo Ludlow en una reunión virtual para presentar el plan. Cabe destacar que se instalarán 19 stands de higiene en los puntos de control de ingreso en la zona de restricción, con capacidad de atención para 500 personas diarias; con cubrebocas, toallitas sanitarias y gel antibacterial.