“This day heralds a new age of space exploration”.

-Elon Musk.

El empresario dueño de Tesla logró lo que nunca: que una empresa privada llevara al espacio a un grupo de astronautas.

La misión Demo-2, llevada a cabo por la compañía de Elon Musk fundada en 2002, SpaceX, y la NASA, concluyó este fin de semana cuando los astronautas Bob Behnken y Doug Hurley aterrizaron con éxito en el Golfo de México a bordo de la cápsula Crew Dragon, alrededor de las 13:48 (hora México) del domingo 2 de agosto, tras un viaje de casi 20 horas.

“Dragon is stable in the water”, escribió Musk en su cuenta personal de Twitter. “Gracias por volar con SpaceX”, escucharon a modo de bienvenida los astronautas desde el centro de control de la misión.

Lo histórico, además de haber enviado una nave tripulada a la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés) por la compañía privada, es que se trata del primer vuelo desde 2011, año en que Estados Unidos retiró su programa especial.

¿Cuál es el futuro de SpaceX?

Según información dada a conocer con anterioridad por la misma empresa, ingenieros de la compañía iniciarán con la revisión de la nave para prepararla para un segundo viaje que, si sale según lo planeado, cuatro astronautas −dos científicos incluidos− volverán a la ISS

Además, SpaceX espera recibir una certificación por parte de la NASA, de tal forma que los próximos vuelos sean misiones regulares y, en un futuro, pensar en desarrollar un programa de tripulación comercial. O bien, lograr la ambiciosa idea de Musk de realizar vuelos a Marte, que podría estar cercana a completarse en los próximos dos años.

“Vamos a ir a la Luna, vamos a tener una base en la Luna, vamos a enviar personas a Marte y llevaremos vida a múltiples planetas. Este día anuncia una nueva era de exploración espacial”, anunció Elon Musk una vez dada por terminada, con éxito, la misión.