Durante los primeros meses de este año, el desplome de viajes internacionales tuvo un retroceso de 65 puntos porcentuales respecto al mismo periodo de 2019, atribuido a las restricciones de viaje y cierre de fronteras en todo el mundo, lo que se traduciría en una pérdida de 440 millones de llegadas.
De acuerdo con información de la Organización Mundial del Turismo (OMT), la poca demanda continuará hasta finalizar 2020 para cerrar el año con un descenso de hasta 58% o bien, de 70% en caso de rebrotes y de que los países vuelvan a implementar restricciones de viajes que limiten o eviten nuevos casos de contagio.
Por otro lado, la OMT declaró que a inicios de septiembre 53% de los destinos han aligerado restricciones para recibir a turistas de todo el mundo.
Dentro de un escenario optimista, la ‘industria sin chimeneas’ empezaría a recuperarse el siguiente año, inicialmente en temas de turismo interno, aunque sería hasta 2024 cuando lograría alcanzar los niveles del año pasado.
Si bien todas las regiones y subregiones del mundo registraron descensos de más del 50% en llegadas de turistas internacionales en el primer semestre de 2020 (1S20), segmentado por naciones: Europa tuvo un descenso de 66%; en América la caída fue de 55%; en África y Oriente Medio, de 57%; Asia y Pacífico, del 72%.
En materia de economía, resultó ser una pérdida de aproximadamente 460 mil millones de dólares, calificada por la organización como mayor a la registrada en la crisis de 2009.