A pesar de cerrar con una apreciación, no se observó una tendencia clara durante los últimos cinco días, pues el tipo de cambio osciló la mayor parte del tiempo entre 20.20 y 20.40 pesos por dólar. El índice ponderado del dólar mostró un retroceso de 0.91%, siendo el mayor desde la primera semana de mayo.
En la semana prevaleció la cautela entre los participantes del mercado, principalmente por los siguientes tres factores:
- El avance de la pandemia del Covid-19 en su variante Delta, lo que representa un riesgo para el crecimiento económico en Estados Unidos y a nivel global. Lo anterior fue evidente en los indicadores PMI de manufactura y servicios correspondientes al mes de agosto y que se publicaron al comienzo de la semana. El PMI de manufactura se ubicó en 61.2 puntos, siendo su menor lectura en 4 meses y además se ubicó por debajo de la expectativa del mercado de 62 puntos. Por su parte, el PMI del sector servicios se ubicó en 55.2 puntos, marcando un mínimo no visto en 8 meses y por debajo de la expectativa del mercado de 59.2 puntos. Al interior, el indicador de creación de empleo se desaceleró durante agosto, marcando su menor nivel desde febrero.
- En México se publicaron indicadores económicos desfavorables para el mes de junio. El IGAE de junio se contrajo a una tasa mensual de 0.87% de acuerdo con series ajustadas por estacionalidad, contrastando con una contracción esperada de 0.30% y siendo el mayor retroceso mensual del indicador desde mayo del 2020, cuando la economía mexicana todavía se veía afectada por el 'gran confinamiento'. Al interior del IGAE se observaron contracciones mensuales en los tres grandes grupos de actividad económica. Es probable que los indicadores de actividad económica para julio y agosto continúen mostrando contracciones moderadas de la actividad económica, principalmente del sector servicios, debido al resurgimiento de casos de Covid-19.
- El mercado se mantuvo a la espera de la conferencia de Jerome Powell en Jackson Hole, que estaba programada para el viernes por la mañana, lo que presionó al tipo de cambio a niveles ligeramente por arriba de 20.40 pesos por dólar. Powell destacó que considera apropiado comenzar a recortar el programa de compra de bonos hacia el cierre del año, en línea con las expectativas del mercado. No obstante, el peso mexicano y la mayoría de las divisas borraron sus pérdidas durante la última sesión de la semana, pues en su comunicado, Powell reiteró que la inflación en Estados Unidos es transitoria y se debe principalmente a problemas en las cadenas de suministro. Bajo este contexto, es probable que la Fed mantenga sin cambios su tasa de interés hasta el 2023, una vez que hayan terminado con el programa de compra de bonos.
Es importante señalar que el movimiento a la baja del tipo de cambio no debe ser interpretado como una tendencia a la baja, pues hacia adelante el peso podría regresar a niveles de 20.40 pesos por dólar conforme se acerca el recorte de los estímulos monetarios. Asimismo, no se descartan episodios de aversión al riesgo relacionados con indicadores económicos poco favorables para México.
La siguiente semana se destaca en México la publicación del informe trimestral de inflación de Banco de México el día martes a las 12:00 horas, en donde será clave conocer si se hizo algún ajuste a las expectativas de inflación y crecimiento económico. Por su parte, el miércoles 1 de septiembre se publicarán las remesas de julio y el indicador IMEF de manufactura y servicios para el mes de agosto.
En la semana, el euro tocó un mínimo de 1.1693 y un máximo de 1.1802 dólares por euro. Por su parte, el euro peso tocó un mínimo de 23.6838 y un máximo de 24.0131 pesos por euro.
Al cierre, las cotizaciones interbancarias a la venta se ubicaron en 20.1895 pesos por dólar, 1.3768 dólares por libra y en 1.1796 dólares por euro.