Después de que la Corte Suprema de Estados Unidos limitara la capacidad de las autoridades reguladoras para aplicar la principal ley nacional contra la contaminación atmosférica, destinada a reducir las emisiones de dióxido de carbono de las centrales eléctricas, diferentes analistas indicaron que la acción es un golpe duro para el medioambiente.
Además, el presidente Joe Biden calificó la medida del tribunal como “devastadora” en la lucha contra el cambio climático, pues el fallo histórico de la Corte Suprema del país representa un gran revés para los planes climáticos que tenía, incuso afectarían al mundo entero.
Es “otra decisión devastadora que apunta a hacer retroceder a nuestro país. Si bien esta decisión corre el riesgo de dañar la capacidad de nuestra nación para mantener nuestro aire limpio y combatir el cambio climático, no cejaré en usar mis capacidades legales para proteger la salud pública y abordar la crisis climática”.
Por una votación de 6 a 3, con una mayoría de jueces conservadores, el máximo tribunal del país dijo que la Ley de Aire Limpio no da a la Agencia de Protección Ambiental (EPA) una autoridad amplia para regular las emisiones de gases de efecto invernadero de las termoeléctricas que contribuyen al calentamiento global.
Con esta resolución, la agencia perdió parte de sus poderes para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. El caso contra la EPA fue presentado por West Virginia en nombre de otros 18 estados mayoritariamente liderados por republicanos y algunas de las compañías de carbón más grandes del país.
Los demandantes argumentaron que la EPA no tenía autoridad para limitar las emisiones en todos los estados. Estos 19 estados están preocupados por el impacto económico que implicaría que sus sectores energéticos se vean obligados a dejar de usar carbón.
En tanto, grupos ambientalistas y meteorólogos están preocupados por dicha decisión, en momentos de aumento del daño ambiental atribuible al cambio climático y pese a las advertencias nefastas sobre el futuro. Asimismo, porque los 19 estados han tenido un progreso escaso en la reducción de sus emisiones.
Los estados que presentaron el caso, han registrado el 44% de las emisiones de Estados Unidos en 2018, y desde 2000 solo han logrado una reducción del 7% en sus emisiones en promedio, además, argumentan que la labor de la EPA reduce empleos en la industria eléctrica.
Un portavoz de la ONU calificó la decisión de la corte como “un revés en nuestra lucha contra el cambio climático"; agregó que ninguna nación por sí sola podría descarrilar el esfuerzo global, pese a que la decisión en este país tendría un efecto en otras agencias más allá del cambio climático y la contaminación del aire.
/Con información de BBC, AP y CNN/