Siguiendo los requisitos de la Mars Society, el asentamiento en el ‘Planeta Rojo’ se planteó como “autosuficiente”, dependiendo muy poco de la importación de materiales de la Tierra. En este sentido, ABIBOO Studio trabajó durante eses junto con más de 35 profesionales de diferentes espacios habitacionales, sociales y culturales.
Esta ciudad, Nüwa, autosuficiente y sostenible, estará ubicada del lado de un acantilado en Marte, en consideración a las condiciones atmosféricas. Sobre el diseño y los sistemas de construcción, Alfredo Muñoz, fundador de ABIBOO, señaló:
“Si construyéramos los edificios como en la Tierra, éstos tenderían a explotar por la presión […] La radiación solar y gamma de arte nos obligó a construir espacios que no estén directamente expuestos al cielo”.
Con Nüwa como capital, se pretende que la ciudad esté dividida en cinco distritos que alberguen entre 200 mil y 250 mil personas cada uno, una solución aplicada a un modelo flexible y escalable donde ‘Abalos City’, por ejemplo, estará situada en el polo norte del planeta para aprovechar el acceso al hielo; mientras ‘Marineris City’ se encontrará en el cañón más extenso del Sistema Solar.
En colaboración con otros académicos y miembros de SONet, los arquitectos desarrollaron soluciones para estructuras que protejan a los habitantes de la radiación de Marte, aseguren el acceso indirecto a la luz solar y los protejan del potencial impacto de los meteoritos.
Asimismo, se dieron a la tarea de resolverla diferencia de presión atmosférica entre el interior y el exterior de los edificios, además de considerar los sistemas de soporte vital, como la producción de alimentos, aire y agua.
La ubicación de Nüwa en el ‘Planeta Rojo’ es privilegiada al tener un abundante y fácil acceso al agua, con un terreno escarpado que ofrece la posibilidad de levantar esta ciudad vertical protegida de la radiación.
Los edificios serán excavaciones dentro de la roca del acantilado, implementadas a través de la construcción de túneles. Será un desarrollo de uso mixto que ofrecerá vivienda residencial y espacios de oficinas y laborales, unidas entre sí mediante una red tridimensional de túneles. Los módulos tienen una forma tubular de 10 metros de diámetro y 60 metros de longitud con áreas verdes y huertos urbanos para brindar bienestar físico y espacios recreativos.
Cada módulo contará con ascensores de alta velocidad, similares a los de los rascacielos en la Tierra.
Con la finalidad de crear una conexión como la vida en la Tierra, el equipo de ABIBOO Studio incluirá dos espacios ‘naturales’, creados de manera artificial. Llevarán por nombre ‘Green-domes’ y actuarán como parques, y otros como vegetación experimental en un entorno con una atmósfera puramente marciana.
En el valle, estructuras específicas albergarán hospitales, escuelas, actividades deportivas y culturales, zonas comerciales y estaciones de tren que se comunicarán con el transbordador espacial. Una montaña artificial actuará como marco visual de la ciudad, ésta posee sistemas de energía auxiliar y estacionamiento para vehículos.
En cuanto a movilidad, se realizará en sentido vertical a lo largo del acantilado. Además, un sistema de autobuses y trenes ligeros proporcionará transporte horizontal; una red de estaciones de tren conectará con el aeropuerto espacial situado en un cráter cercano.
Finalmente, cabe destacar que, tras un corto periodo de inversión de capital y suministro desde la tierra, este desarrollo en Marte de mantendrá y crecerá por sus medios y de manera sostenible, donde todos los materiales necesarios se obtendrán desde el mismo ‘Planeta Rojo’ procesando el carbono y otros materiales.
Para poder llegar a esta ciudad, desde la Tierra deberían ofrecerse viajes cada 26 meses que durarían entre uno y tres hasta aterrizar en Marte. Nüwa podría estar lista para ser habitable en 2100.