El estudio internacional Zaha Hadid Architects (ZHA) ha sido seleccionado para diseñar el primer hotel en Japón de la marca NOT A HOTEL, una propuesta que fusiona arquitectura de vanguardia, sensibilidad ecológica y conexión con el entorno natural en la isla de Okinawa.
Ubicado en un sitio costero de 25 mil 322 metros cuadrados, entre las aguas turquesas y las costas boscosas de Okinawa, el hotel diseñado por ZHA se integra cuidadosamente con el paisaje subtropical para minimizar su impacto ambiental.
La arquitectura sigue las formaciones naturales de piedra caliza Ryukyu y la topografía del terreno, articulando una serie de terrazas escalonadas, patios y jardines que reflejan las variaciones del sitio y ofrecen vistas panorámicas al océano sin obstrucciones.
Diseño impulsado por el clima y paisaje
El diseño incorpora una lectura contemporánea de los aleros profundos y voladizos tradicionales de Okinawa: grandes canopies extendidos proporcionan sombra a espacios exteriores y circulaciones, al mismo tiempo que mejoran el confort térmico y reducen la ganancia de calor en el clima húmedo subtropical.
El hotel también está diseñado para responder a los desafíos climáticos de la región: la totalidad de las instalaciones se eleva al menos 6.5 metros por encima del nivel de alta marea para mitigar riesgos de marejadas, tormentas y ciclones, y la estructura incorpora soluciones ingenieriles para enfrentar vientos intensos, precipitaciones y actividad sísmica asociada a la zona.
Materialidad, sostenibilidad y artesanía local
La propuesta combina innovación arquitectónica con materiales y artesanía regional. Elementos como pino de Okinawa tallado, piedra caliza local y cerámica producida en talleres cercanos. La construcción modular y el uso de componentes prefabricados buscan minimizar la huella ecológica del proceso.