De acuerdo con diversos especialistas, es clave que la industria automotriz migre hacia la electromovilidad a fin de reducir la contaminación, por lo que la participación de nuevos prototipos eléctricos será esencial para cumplir con la COP21 o Acuerdo de París, que establece medidas para la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero o CO2.
En este sentido, un estudio reciente del Consejo Internacional de Transporte Limpio (ICCT) señala que solo los vehículos eléctricos de batería (VEB) y de pila de combustible de hidrógeno (FCEV) impulsado por electricidad renovable, serán aptos para lograr la meta de mantener el calentamiento global y mantenerlo por debajo de los 2 °C.
Ante ello, el organismo recomendó la eliminación gradual del registro de nuevos vehículos de motor de combustión desde el 2030, cinco años antes que la Unión Europea (UE) inicie la prohibición de la comercialización de ejemplares con motores térmicos.
El ICCT refiere que la emisión atribuible a los coches eléctricos es entre un 66 y un 69% menor en comparación con los vehículos nuevos de gasolina, cifra correspondiente al sector automotriz de la UE y menor en Estados Unidos (60-68%), China (37-45%) e India (19-34%).
Descarbonización progresiva
También menciona que si se cumplen las políticas energéticas actuales de descarbonización del sector, la brecha se acrecentará aún más en el futuro y alcanzaría el 77% en Europa, el 76% en Estados Unidos, el 64% en China y el 56% en India.
Esta es una cuestión que las economías del mundo no dejarán pasar, pues otro estudio de Bloomberg New Energy Finance (BNEF) estableció que entre el 2025 y el 2027 la fabricación de autos y utilitarios cero emisiones costará menos que la de vehículos con motor de combustión.
Según la categoría, los autos eléctricos constituirían el 100% de las ventas de vehículos nuevos en la UE para 2035. “Los sedanes y SUV eléctricos serán tan económicos de fabricar como los vehículos a gasolina a partir de 2026, y los autos pequeños los seguirán en 2027”.
En cuanto a los utilitarios, el reporte indica que los modelos livianos serán más baratos de fabricar a partir de 2025 y los pesados desde 2026. Además, BNEF considera que los vehículos cero emisiones serán también más baratos de comprar, incluso antes de las ayudas, sin contar el ahorro de combustible a largo plazo.
Así, el precio antes de impuestos de un sedán eléctrico hacia 2026 se emparejará con el de uno con motor de combustión, en 20,000 euros, ante los casi 40,000 euros de la versión eléctrica 2020. El descenso de los costos de fabricación se explicaría por la caída del precio de las baterías y el desarrollo de cadenas de producción dedicadas exclusivamente a vehículos eléctricos.
De camiones a taxis voladores
En el amplio catálogo de marcas de la industria automotriz, hacia los próximos años se consideran diversos medios de transporte, para personas y mercancías, que optimizarán la movilidad, electromovilidad y darían una mejora en los tiempos de traslado, pero no es seguro que sea una inversión barata o a gran escala.
Porsche Consulting indica que manufacturar taxis voladores de despegue y aterrizaje vertical (VTOL) no es un proyecto sencillo ni barato, pues la industria de los coches voladores alcanzaría ganancias de 32 mil millones de dólares (mdd) para el 2035, pero requerirá una inversión de unos 20 mil mdd durante los primeros años.
Y en términos de infraestructura, estos taxis necesitarían entre mil y 2,500 puntos de despegue y aterrizaje en hasta 60 ciudades de todo el mundo para ser viables, además, se requiere la regulación de diferentes gobiernos, refiere un reporte de la división de investigación de la marca alemana.
Más movilidad aérea sustentable
En tanto, siguen los proyectos; por ejemplo, Hyundai y el gobierno de Reino Unido se asociaron a la empresa Urban Air Port para desarrollar y levantar el primer puerto para futuros aviones eléctricos de despegue y aterrizaje vertical denominados eVOLT.
Una sorpresa la aporta Uber, con Uber Elevate, que será desarrollado por Bell Helicopters, Embraer y Pipistrel, y volará a una altura entre 300 y 600 metros usando exclusivamente energía eléctrica. Tendría una velocidad de hasta 240 kilómetros por hora y una autonomía de casi 100 kilómetros.
Otro ejemplo está en las carreteras: O camión, el e-Delivery eléctrico de Volkswagen salió a la venta anticipada hace unos días, fue desarrollado íntegramente en Brasil y será fabricado en Resende, en Rio de Janeiro.
Este modelo considera dos versiones con diferentes capacidades de carga y ejes, y es considerado un vehículo costoso, pero promete compensar la diferencia en comparación con los automóviles diésel. Y tiene el récord de capacidad de carga, entre los camiones eléctricos del país, que pueden transportar hasta 9.055 kilos.
En tanto, Air Products y Cummins Inc. anunciaron que acelerarán la integración de camiones con pilas de combustible de hidrógeno en América, Europa y Asia. Air Products planea convertir su flota global de aproximadamente 2 mil camiones en vehículos cero emisiones con pila de combustible de hidrógeno. Estas dos firmas esperan que la fase de demostración inicie en 2022.
Adicionalmente, trabajarán para aumentar la accesibilidad del hidrógeno renovable, incluyendo oportunidades de infraestructura que promuevan la adopción de este combustible para la movilidad.
Ford anunció que el próximo año abrirá las puertas de Ion Park, un nuevo centro global de baterías para vehículos eléctricos, en Romulus, Michigan, con una inversión total de 185 mdd y forma parte de una inversión mayor de 30 mil mdd para alcanzar sus objetivos en cuanto a electrificación hacia el 2025.