Por Notimex CIUDAD DE MÉXICO.- Cemex admitió que de no asegurar un refinanciamiento en términos favorables para las "cantidades sustanciales" de su deuda con vencimiento en 2009 y años posteriores no podrá cumplir sus próximas obligaciones de pago. A diciembre de 2008, la empresa tenía una deuda de 18 mil 784 millones de dólares, de los cuales seis mil 934 millones corresponden a compromisos de corto plazo y 11 mil 850 millones son de largo plazo, además de que la empresa no descarta incurrir en más deuda en el futuro. En un reporte presentado a la Comisión de Valores de Estados Unidos, la transnacional mexicana reconoce asimismo que aún posee una cantidad sustancial de deuda a vencerse en los próximos años, no obstante el plan de refinanciamiento que completó recientemente. Derivado de ello, refiere que su calificación crediticia fue reducida por abajo del grado de inversión por Standard & Poor"s, lo que impactará negativamente los términos en los cuales pudiera refinanciar su deuda. Aunado a lo anterior, la víspera Fitch Ratings ajustó a la baja las calificaciones de la empresa, entre ellas las de deuda largo plazo en escala global tanto para moneda extranjera como local, además de que la perspectiva permanece negativa. La agencia calificadora explicó que estas acciones de calificación toman en consideración un posible debilitamiento en varios de los mercados que tuvieron un desarrollo positivo durante 2008, como México, Centro y Sudamérica y Asia. Además, consideran los desafíos que Cemex enfrenta al tratar de desinvertir aproximadamente dos mil millones de dólares de activos durante 2009, para enfrentar vencimientos de deuda de aproximadamente cuatro mil 100 millones, tres mil 800 millones y siete mil 800 millones de dólares en 2009, 2010 y 2011, respectivamente. En su reporte de este martes la cementera señala que a pesar de las agresivas medidas adoptadas por los gobiernos y bancos centrales es posible que la economía global caiga en una recesión más profunda e incluso en una depresión. Advierte incluso que los ambicioso planes de infraestructura anunciados en varios países pudieran no ser suficientes para estimular el crecimiento económico debido a retrasos en su implementación, lo que afectaría la demanda de sus productos. La cementera señala asimismo que en un mercado volátil e incierto el uso de instrumentos derivados pudiera afectar negativamente sus operaciones. A diciembre de 2008, la compañía registró una pérdida neta de aproximadamente 15.7 millones de pesos en instrumentos financieros. Esta cifra contrasta con la ganancia neta por dos mil 387 millones de pesos reportada al término de 2007.