Especialistas en materia de inversiones prevén cambios dramáticos para el negocio. Y sí: estos cambios obedecen a la sorpresiva victoria de Donald Trump como el presidente número 45.
Durante 2016 se han observado crecimientos saludables en los valores gracias a las bajas tasas de interés, precios del gas en Estados Unidos, un crecimiento moderado de salarios y una nueva generación que busca entrar al mercado inmobiliario.
I.Vienen más regulaciones aéreas. La Federal Aviation Administration (FAA) de Estados Unidos reguló el uso de drones para operadores comerciales. Cualquier entidad con ánimos de lucro que vuele un dron, deberá tener una licencia de piloto, por lo que se prevé que las empresas lo hagan sin menos burocracia. El uso de aparatos no tripulados por parte de la industria de bienes raíces es probable que aumente drásticamente.
De esta manera, los agentes inmobiliarios podrían hacer uso de estos conocimientos para mejorar la presentación de sus inmuebles, por lo que habrá más publicación de fotografías aéreas, dado que más que una ubicación, un comprador de hoy en día busca perspectiva. Además, podrían hacerse también recorridos virtuales en vivo mediante estos aparatos y tener imágenes estables de los inmuebles, barrios y las locaciones de centros comerciales, escolares y otras.
II. Habrá un nuevo modelo de vivienda. Muchos barrios han comenzado a agregar servicios urbanos para mejorar el ambiente donde puedan vivir, trabajar y recrearse justo en el centro de la ciudad. Estos son los desarrollos mixtos, que ofrecen caminar al trabajo y disfrutar de los mejores aspectos de la ciudad a pie.
John Burns, un consultor inmobiliario, pronostica que el 80% del crecimiento residencial se produzca en las comunidades mixtas (urbanas y semiurbanas) durante los próximos 10 años.
III. Primera casa. La generación conocida como millennials, que son los nacidos entre 1980 y finales de los 1990, comprarán su primera casa en 2017 y se prevé que muchos podrían tener más ahorros de lo que muchos piensan.
Por ejemplo, durante 2016, 17% de los compradores menores de 35 años en los Estados Unidos fueron capaces de ahorrar lo suficiente para el enganche de una casa en un año, en comparación con el 14% de otros grupos. De hecho, 37% de los compradores menores de 35 años dijeron ser capaces de ahorrar lo suficiente para el pago inicial en 6 meses siguientes.
IV. Nueva presidencia en EU. Todo lo que sabíamos sobre las tasas de interés en los Estados Unidos y los movimientos de la Reserva Federal han cambiado y lo han hecho de manera drástica. Los temores de recesión podrían crecer si Trump reduce el gasto gubernamental durante su primer año de gobierno. La incertidumbre del mercado de valores se incrementa en la medida en que se acerca el 20 de enero, pero por lo pronto, es probable que no haya cambios en las tasas de interés.
Ante la crisis, la compra de viviendas será fuerte durante 2017, lo cual es una buena noticia para un mercado con apetito inmobiliario. En el camino, las tasas de interés podrían comenzar a aumentar más rápidamente, si los planes de crecimiento económico de Trump encienden la inflación.
V. Pensar en las próximas generaciones. Sabemos que los millennials están llegando al mercado inmobiliario, pero no pasará mucho tiempo para que la generación siguiente busque también independencia. Ellos buscarán bajas tasas de interés, mejores perspectivas de trabajo y salarios más altos para amortiguar mayores costos.
Como botón, basta saber que 97% de los jóvenes actualmente quieren ser dueños de una casa, de modo que desde ya buscarán alimentar el mercado inmobiliario.
Con información de Inversor Global.