A finales de enero de 2013, la obra fue evaluada por ASA para valorar la situación de las instalaciones y fijó el avance de la construcción en un 30%, por lo que tomó la decisión de continuar con el desarrollo del proyecto.
Dado que son más de tres años que está detenida esta obra, el organismo operador de la red aeroportuaria comentó que se requiere fundamentar la elaboración de este proyecto con estudios de viabilidad y rentabilidad de impacto ambiental, costo beneficio y plan de negocios.
Actualmente, agregó, no se cuenta con los aspectos técnicos, operacionales, ambientales, legales, económicos y financieros que servirán de guía para la mejor toma de decisiones, por lo que será necesario contratar empresas especializadas para realizar los estudios correspondientes, los cuales tendrán un costo de 5.8 millones de pesos y que deberán iniciar en julio del 2014.