A través del estudio New Business Models in the Accommodation Industry (Nuevos modelos de negocio en la industria del alojamiento) que elaboró la Organización Mundial del Turismo (OMT), con el apoyo de la secretaría de Turismo de México (Sectur), se puso en manifiesto que los gobiernos han reportado problemas al momento de implementar las normativas y regulaciones “por falta de claridad local y por no saber con certeza quién es el responsable de supervisar y regular los alojamientos turísticos para estancias cortas”.

Al respecto el secretario general de la OMT, Zurab Pololikashvili, afirmó que sigue habiendo muchos retos, entre ellos la aplicación en la práctica de las normativas y regulaciones en el mercado de los alquileres turísticos para estancias cortas. Una buena gobernanza y la cooperación efectiva entre los sectores público y privado son factores clave para afrontar con éxito los desafíos”.

Se trata del primer informe sistemático de cómo los gobiernos y las autoridades locales abordan y gestionan los nuevos modelos de negocio en la industria del alojamiento, los casos que se analizaron fueron de 21 países, los de los Países Bajos; Italia y España, pises de América como México, y de Asia como Japón. De todos los países analizados México tiene el menor número de regulaciones con apenas cuatro, de las cuales tres se refieren a competencia leal y solamente una está relacionada con la protección al consumidor.

La OMT, consideró que la “economía colaborativa” ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años y “parece estar preparada para superar al crecimiento del alojamiento tradicional”, e indicó que en la mayoría de los casos estudiados las medidas implementadas se refieren a áreas de “competencia leal” y “protección del consumidor”, concretamente medidas en materia fiscal, registros y permisos.

Por su parte el secretario de Turismo, Miguel Torruco Marqués, mencionó en ese mimo informe, que estos modelos son una oportunidad para fortalecer iniciativas y estrategias dirigidas a apoyar los esfuerzos del gobierno de dar forma a los marcos regulatorios que acercan y anticipan el impacto de la tecnología emergente y detalló que los destinos turísticos se reinventan “bajo el paradigma de la innovación tecnológica y las plataformas digitales se constituyen como parte de un mejoramiento de las interacciones y los comportamientos extendidos. No solo permiten el desarrollo de relaciones directas, sino que también generan mercados multilaterales sólidos”.