Con las asignaciones de la Ronda Cero y Ronda Uno se garantiza la viabilidad de Pemex y se sientan las bases para su expansión.

Las áreas de exploración y los campos en producción asignados a Petróleos Mexicanos (Pemex) garantizan la viabilidad de su operación, en el corto y mediano plazo, como empresa productiva del Estado. Además de sentar las bases para su expansión a futuro.

En este sentido, la Ronda Cero, es el proceso por el cual se asigna a la ahora empresa productiva del Estado el 83% de las reservas petroleras (2P), que suma las probadas y las probables, y 21% de los recursos prospectivos del país; es decir el 100% de lo que la entidad solicitó en 2P, así como el 67% de los recursos prospectivos. El director general de Pemex, Emilio Lozoya Austin dijo que las áreas asignadas, representan un balance adecuado entre yacimientos en los cuales Pemex tiene una gran experiencia y de hecho es líder a nivel mundial, y yacimientos de nuevo tipo sobre los que descansa el futuro petrolero de México.

Asimismo, los campos asignados permiten garantizar la estabilización de la producción a costos competitivos y abren la posibilidad de asimilar la tecnología necesaria para desarrollos futuros, ya que las áreas exploratorias asignadas han sido estudiadas en mayor detalle, por lo que existe la certeza de descubrir más reservas con costos de descubrimiento relativamente bajos o competitivos.

El tamaño total del área estipulada a Pemex, en esta ronda, alcanza una superficie cercana a 90,000 km², lo que significa un estimado de 20,600 millones de barriles de petróleo crudo, que alcanzan para más de 15 años de explotación, además de otros cinco años en superficies de exploración; es decir, más de 20 años calculados a un ritmo estimado de producción de 2.5 millones de barriles diarios (mdbd). Esto significa que Pemex tiene asegurado su plan de desarrollo en el futuro inmediato y, con las nuevas modificaciones jurídicas, fiscales y administrativas, se fortalece.

En la Ronda Cero el área estipulada a Pemex alcanza los 90,000 km2.

Asimismo, el titular de la dependencia precisó que Pemex ha identificado, de entre los campos que le han asignado, 10 oportunidades de asociación estratégica a consolidar en un lapso de 13 meses, proceso que iniciará en noviembre próximo. Estos proyectos, involucran la inversión de más de 32,000 millones de dólares (mdd) en lapsos que varían de cinco a 10 años, según cada proyecto que inicialmente se conforma por cuatro paquetes.

En cuanto a la Ronda Uno, a llevarse a cabo a principios de 2015, conforme al Reglamento de la Ley de Hidrocarburos, se precisa la necesidad de crear un marco que permita detonar nuevas inversiones en exploración y producción, en donde las inversiones privadas para actividades de exploración y producción alcanzarán los 12,659 (mdd). Estas inversiones se complementarán con las asociaciones que lleve a cabo Pemex y que implican recursos extras por 4,100 mdd. De acuerdo con la empresa productiva del Estado, las expectativas de inversión anual estimadas en la industria petrolera representarán cerca de 8,525 mdd con miras hacia 2018.

Por su parte, el gobierno, tiene como meta incrementar la producción de petróleo de 2.5 a 3 mdbd para los próximos cuatro años y, posteriormente, a 3.5 mdbd en 2025. En el caso del gas natural se busca pasar de 5,700 millones de pies cúbicos diarios a 8 millones en 2018 y 10,400 millones en 2025.

Los cuatro iniciales

El primer paquete consistirá en la migración de los contratos de 11 campos en los próximos seis meses; el segundo paquete consta también de 11 contratos Integrales o de Obra Pública Financiada en Chicontepec y en Burgos, con más de 1,600 millones de barriles en reservas 2P. Estos contratos migrarán a las nuevas modalidades entre febrero y agosto de 2015. “El segundo paquete está enfocado a tres campos de crudo extra pesado con densidad menor o igual a 11 grados API; que es como si fuera una miel pesada y por lo tanto representa un reto tecnológico para Petróleos Mexicanos: estos son Ayatsil, Tekel y Utsil”, señaló Lozoya Austin.

Asimismo, explicó que el tercer paquete está asociado al desarrollo de dos campos gigantes de gas en aguas profundas que contienen 212 millones de barriles de petróleo crudo, equivalente en reservas 2P y supone inversiones de 6,800 mdd en un horizonte de 10 años.

El cuarto paquete tiene como objetivo establecer dos asociaciones estratégicas y está enfocado a desarrollar los campos recientemente descubiertos en aguas profundas en el área de Perdido, en particular, Trión y Exploratus.

En suma, la reforma permite migrar los acuerdos actualmente vigentes a nuevos contratos de exploración y extracción, con mejores términos fiscales.

Empresa Productiva del Estado

Pemex (así como la Comisión Federal de Electricidad) deja de estar sujeta a la Ley Federal de Entidades Paraestatales, con lo que sus subsidiarias Pemex-Exploración y Producción, Pemex-Gas y Petroquímica Básica, Pemex-Petroquímica y Pemex-Refinación quedan sujetas a la reorganización corporativa conforme a lo dispuesto en el Octavo Transitorio de la nueva Ley de Pemex.

Esto significa que bajo el nuevo esquema, las entidades tendrán un carácter empresarial, así como un régimen especial nuevo y separado del resto de las entidades paraestatales.

Contará con autonomía presupuestaria, de manera que estarán sujetas al balance financiero y al techo de servicios personales; además, quedan excluidas de la aplicación de las leyes de adquisiciones y dispondrán de un régimen competitivo, diseñado para atraer y retener personal altamente especializado.

Tendrán un consejo de administración con una estructura organizacional acorde con las mejores prácticas internacionales, entre ellas: establece garantías institucionales para evitar intromisiones al incorporar requisitos estrictos de acceso para ocupar el cargo de consejero; reduce la participación de las distintas dependencias del Gobierno Federal e incorpora a consejeros independientes. Asimismo, se aprobaron regímenes especiales de responsabilidades y remuneraciones acordes con los de empresas equivalentes del sector privado.

Contemplan la participación de testigos sociales para vigilar los procesos de contrataciones mediante su participación en calidad de observadores en las distintas etapas de los procedimientos de contratación, igualmente podrán emitir un testimonio final que incluya sus observaciones y recomendaciones respecto a la contratación de que se trate y dar aviso de irregularidades a la Auditoría Interna y a la Unidad de Responsabilidades.

Las empresas productivas del Estado contarán con un mecanismo y normas que permitan identificar de una manera ágil y precisa, a los responsables de tomar decisiones, así como establecer un sistema de denuncias y quejas anónimas, mediante el que cualquier persona pueda denunciar actos u omisiones a fin de que puedan identificarse y, en su caso, perseguir conductas ilícitas.

Refinería de Ciudad Madero, Tamaulipas.

Texto:Real Estate Market & Lifestyle

Foto: GBM,EPS,ORO NEGRO,PEMEX,OIL AND GAS