Las nuevas reglas de operación para la asignación de subsidios a la vivienda dadas a conocer por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), no tomaron en cuenta que las tres mayores vivienderas del país están reestructurando su deuda, además del papel que podían haber tenido en esta situación las políticas y acciones del gobierno federal, señaló un reporte de Accival Banamex.
En lo que respecta a la implementación de los dos nuevos programas que anunció la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para impulsar la construcción de vivienda y proveer de mayor liquidez al sector, no serán suficientes para resolver el riesgo de refinanciamiento que prevalece en la industria, resaltó un analista de Actinver Casa de Bolsa.
Resaltó Actinver que el nivel de deuda a corto plazo de Urbi, Homex, Geo y ARA, suma un total de 17,200 millones de pesos, más de los 10,000 millones de los programas.
En opinión de expertos, solamente contribuirán a minimizar el riesgo de refinanciamiento de la industria en una forma parcial y no podrán resolver las perspectivas de un menor crecimiento en el sector.