Autoridades de Múnich, en Alemania, anunciaron la cancelación del Oktoberfest, al señalar que el riesgo de contagio de COVID-19 es muy alto, pese a que el evento se llevaría a cabo casi a finales de año.
El mundialmente famoso festival debía celebrarse entre el 19 de septiembre y el 4 de octubre; y anualmente, suele congregar a aproximadamente seis millones de visitantes en la capital de Baviera.
Markus Soeder, gobernador de la región, sostuvo tras una reunión con el alcalde de la Dieter Reiter: “Estuvimos de acuerdo en que el riesgo es simplemente demasiado alto. (En el evento) no se puede mantener la distancia de seguridad ni trabajar con protección facial”.
El Oktoberfest, que se celebra desde 1810 en la ciudad bávara, ha sido anteriormente cancelado en 1854 y 1873 por los brotes de cólera; en 1923 por la hiperinflación en el país; y durante la Primera y Segunda Guerra Mundial. Por otra parte, en Pamplona, España, el ayuntamiento anunció la suspensión de las fiestas de San Fermín, que se realizan anualmente del 6 al 14 de julio.
Ana Elizalde, alcaldesa en funciones, explicó que es una decisión “dura y triste que ha tenido el consenso de todos los grupos municipales, tras señalar que el alcalde de Pamplona, Enrique Maya, está contagiado de Coronavirus y se encuentra en casa, aislado”. Informó que parte de los 3 millones de euros destinados al presupuesto de las fiestas, se dedicará a atender la emergencia sanitaria causada por el COVID-19.