Con el fin de apoyar a los clientes de las instituciones financieras del país afectados por la crisis económica generada por el COVID-19, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (NCBV) anunciaron un plan de cuatro medidas para incentivar y permitir a los bancos y otros intermediarios financieros reestructurar créditos.

Juan Pablo Graf Noriega, presidente de la CNBV, dijo que la finalidad es “que las reestructuras cuenten con una disminución de las tasas de interés, con la ampliación de plazos y, en su caso, disminuciones de los saldos, que podría hacer que los acreditados paguen, en el caso de créditos mensuales, una cantidad menor de lo que inicialmente tienen contemplado”.

Las nuevas medidas para incentivar y permitir a bancos y otros intermediarios financieros reestructurar los créditos de los clientes que así lo soliciten son:

1. Computar un monto menor de reservas específicas cuando se pacte una reestructura con el cliente.

2. Reconocimiento de las reservas específicas que se liberen por la reestructura de un crédito como reservas adicionales.

3. Reconocimiento de un mayor capital regulatorio al considerar las reservas adicionales como parte del capital complementario.

4. Reducir prudentemente los requerimientos de capital por riesgo de crédito. Se revisarán los requerimientos de capital de las carteras reestructuradas y los ponderadores de riesgo de capital para las carteras reestructuradas y los créditos que se aprueben a partir de ahora.

Sobre estas nuevas facilidades regulatorias, Arturo Herrera Gutiérrez, titular de la SHCP, dijo que aplican a todos los bancos y para todos los clientes. Precisó que quienes hagan reestructuras no serán señalados o marcados ante las instituciones financieras de crédito de morosidad.

/Con información de Expansión/