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El país puede ser un 'plan b' al problema que las empresas francesas encontraron con China en el contexto de la pandemia; las naciones trabajan en inversiones de turismo sostenible.

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Para las empresas francesas, México se ha convertido en una opción como fuente de proveeduría y opción de hacer negocios, luego de los problemas de abasto y de la crisis comercial que originó China tras la pandemia derivada del COVID-19, afirmó Marc-Antoine López, director de Business France en México.

“Muchas empresas ya se dan cuenta que México puede ser una solución, un plan b, a este problema que encontraron con la crisis muchas empresas francesas con China, eso es un punto muy favorable para México, el deseo de extender, de conocer otras fuentes de aprovechamiento de parte de las empresas”.

Refirió que con la crisis del COVID-19 “muchas empresas francesas se dieron cuenta que estamos ligados por el mercado chino, la fuente de mercancía, de fuente aprovisionamiento que podría hacer China, pero hoy era un problema”.

En videoconferencia, el directivo dijo que a nivel comercial, México es visto como “la plataforma de América Latina”, primero con el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), por la parte norte; y con la Alianza del Pacífico y los acuerdos de libre comercio entre Chile, Perú, Colombia y Panamá y el Tratado con la Unión Europea.

La agencia para el desarrollo internacional de las empresas francesas reveló que firmas de ambos países trabajan en inversiones agropecuarias y de turismo sostenible, con inversión privada, ya que existen oportunidades de interacción comercial entre ambas naciones; acuerdos que van a salir entre Quintana Roo y regiones de Francia.

De acuerdo con datos de la Confederación de Cámaras Industriales, la cifra de Inversión Extranjera Directa (IED) de Francia a México alcanzó 8 mil millones de dólares (mdd) en los últimos años, además, en el primer semestre de 2019 el flujo de IED de Francia a México fue cercano a 600 mdd.