De acuerdo con un reporte, la venta del mercado global de bienes de lujo se contrajo un 23% a 217 mil millones de euros (mde) este 2020, en comparación con los 281 mil mde del 2019; porcentaje que no se registraba desde el 2009.

Según Bain & Company, esta reducción ocurre por la pausa global del sector turismo y los largos periodos de confinamiento derivados del COVID-19. Por lo que las ventas repuntarían en el 2021 un 15%, pero hasta el 2023 el mercado lograría mejores cifras.

Esto, dependiendo de las tendencias de recuperación económica entre el 2022 y el 2023, asimismo, de la confianza de los consumidores respecto a la crisis sanitaria y la reactivación de los flujos del turismo en el mundo.

Así, a la venta de los zapatos la rebaso la demanda de zapatillas tipo tenis, y las joyas vieron una demanda sostenida en Asia y se beneficiaron de las ventas online. Los relojes y las prendas de vestir disminuyeron un 30 por ciento.

El estudio indica que pese a que las compras en línea de artículos de lujo se han disparado, duplicando su participación en un 23% este año, las marcas tendrán que hacer un gran esfuerzo para activar las compras en tiendas físicas. 

De esta forma, las marcas deberán ajustar sus estrategias en la nueva realidad de las compras de lujo, evolucionar el papel de la tienda física y maximizar la experiencia del cliente, señala la marca.