El cambio de domicilio y la movilidad no son ningún problema para Carmelina Esquer Camacho, quien recientemente adquirió una residencia en Houston, y además, pidió que se cambiaran las oficinas de Pemex Procurement International (PPI) a una ubicación más cercana a su domicilio.
La filial de Pemex se ubicaba anteriormente en el 10344 de Sam Houston Park Drive, un edificio corporativo donde el personal confirmó a la organización Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, que PPI había dejado dos suites a inicios de 2022, desde donde se hacían 28 minutos a la casa de Esquer.
Pero al mudarse a los pisos 7 y 8 de una torre corporativa del 777 de North Eldridge Parkway, a solo 15 minutos de la casa de la funcionaria, Esquer tendrá menos problemas de tráfico para llegar a tiempo a su trabajo en Pemex.
Por su fuera poco, Esquer mantiene en secreto los contratos de la filial de Pemex en Houston, incluidos los de Baker Hughes y Vitol.
La ejecutiva, que no cuenta con experiencia en el ramo petrolero, sí tiene un sueldo 100% mayor a Obrador, lo cual le ha permitido adquirir una casa valuada en 400 mil dólares, y por si fuera poco, a 15 minutos de donde vive José Ramón López Beltrán, hijo de Obrador.
Según MCCI, Esquer resguarda en sigilo su nómina y los contratos multimillonarios que ha suscrito con compañías multinacionales, entre ellas Baker Hughes y Vitol.
Pemex Procurement International (PPI) es la filial responsable de las compras en el extranjero de la empresa productiva del Estado, Pemex, la cual es dirigida desde mediados de 2019 por Carmelina Esquer Camacho.
Una fuente informó que el sueldo mensual de Esquer es equivalente a 300 mil pesos, muy superior a la remuneración de Obrador. Lo anterior contraviene la Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos, publicada el 19 de mayo de 2021 en el Diario Oficial de la Federación, que obliga a todos los funcionarios a percibir un salario menor al del Presidente, que es de 166 mil 532 pesos mensuales bruto y 115 mil 739 pesos neto.
Irónicamente, en febrero de 2019, meses antes del nombramiento de Esquer como directora de PPI, Obrador dijo sobre esa filial en Houston: “Estamos limpiando esa empresa, porque es la que compra los combustibles, es la que tiene la venta, también, del petróleo en el extranjero, es una de las empresas más importantes, estratégicas. Se está limpiando de malos manejos”, pero en los hechos, hay realidades que rebasan a los discursos.
Sobre el inmueble, diversos sitios especializados como Realtor, Zillow y Redfin, arrojan que el valor comercial actual de la casa va de los 404 mil a los 431 mil dólares.
La casa cuenta con una fachada en ladrillo y piedra en tonos color café y beige, en un entorno tranquilo y privado, que cuenta con amplias áreas verdes e incluso, lago artificial.
Durante décadas, Pemex fue el foco de la corrupción en los gobiernos panistas, como lo demostraron los escándalos de 1994, con Carlos Ruiz Sacristán y su designación como alto ejecutivo en IEnova, posterior a ejercer un año la dirección de Pemex, con Ernesto Zedillo (1994-2000).
O el escándalo de Luis Ramírez Corzo (en la gestión de Vicente Fox), con la empresa Caterpillar, que obtuvo contratos por 30 mil millones de pesos en los dos años que Luis Ramírez Corzo estuvo al frente de PEMEX.
O el de Juan José Suárez Coppel, que benefició a Jacobs Engineering Group. Ni un año tardó Juan José Suárez Coppel desde su salida de PEMEX para entrar como consejero independiente a ese grupo. Coppel fue funcionario con Felipe Calderón.
O qué decir de Emilio Lozoya Austin, quien benefició a la empresa OHL. En resumen, Morena continúa en la misma línea de contratos a modo y aprendizajes políticos del pasado. Pero a diferencia del PRI y el PAN, la funcionaria cuida del medio ambiente y la cercanía con los amigos.
Con información de MCCI y PoderLatam.org