|  

La desarrolladora de vivienda planea utilizar los recursos de este programa de certificados bursátiles de corto plazo para usos corporativos generales, incluyendo requerimientos de capital de trabajo, dijo la calificadora S&P.

3 No me gusta0

 

Ruba, una desarrolladora mexicana de vivienda, planea emitir certificados bursátiles o deuda bursátil de corto plazo por un monto de hasta 500 millones de pesos (mdp), lo cual le permitirá diversificar sus fuentes de financiamiento, indicó la agencia calificadora S&P.

“Las emisiones de corto plazo se realizarían al amparo de un programa dual de certificados bursátiles de corto y largo plazo con carácter revolvente por hasta 2 mil millones de pesos, sin que las emisiones de corto plazo excedan los 500 millones de pesos”, precisó.

La firma calificadora abundó que el programa tiene una vigencia de 5 años, después de que reciba la autorización correspondiente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV). 

Ruba planea utilizar los recursos de este programa de certificados bursátiles de corto plazo para usos corporativos generales, incluyendo requerimientos de capital de trabajo, dijo S&P, y asignó la nota crediticia ‘mxA-1+’ al presente programa de certificados bursátiles. 

 

“A pesar de que estas emisiones representarían deuda incremental, continuamos esperando que la empresa mantenga sólidos indicadores crediticios en los próximos 12 a 18 meses, con un índice ajustado de deuda neta a EBITDA por debajo 1.0x (veces) y un flujo de efectivo discrecional (DCF, por sus siglas en inglés) a deuda positivo a partir de 2024”, puntualizó S&P. 

 

Por ello, indicó, esta transacción tendrá un impacto neutral en la calificación crediticia de Ruba de largo plazo actual de ‘mxAA-’. Añadió que para el término de este 2023, estima una ligera contracción en el número de viviendas escrituradas, luego de que la compañía alcanzó altos niveles en 2022, por encima de 10,300 unidades, un nivel no visto desde 2018. También se anticipa que logre crecer más de 7% sus ingresos.

Este efecto de menor volumen de ventas se espera sea mitigado a través de un incremento en el precio promedio de las unidades, lo que le permitiría mantener un crecimiento en ingresos por encima de 8 por ciento. 

“Para 2024, consideramos que Ruba debería retomar la senda de crecimiento en el número de unidades escrituradas, apoyado en su flexibilidad para adaptar su oferta de vivienda en función de la demanda del mercado, el déficit habitacional del país y por la actividad económica impulsada por las inversiones relacionadas con la relocalización (nearshoring) en sus mercados clave”, consideró.