Con este reporte, de enero a noviembre del año recién finalizado México creció 1.9% en términos anuales.

Respecto a noviembre, las expansiones de 8.9% en el sector agropecuario y 2.6% en los servicios contrarrestaron la contracción de (-) 1.5% en la industria. En el sector servicios destacaron los crecimientos firmes del comercio mayorista, transportes y servicios financieros. Por otro lado, el sector industrial sufrió una fuerte contracción en la construcción y minería, que contrarrestaron la expansión en manufactura

Analistas de Invex señalaron que “el escenario de alta incertidumbre seguirá lastrando el crecimiento económico. Sin embargo, el consumo seguirá siendo el principal motor de crecimiento y esperamos un ligero repunte del sector manufacturero, apoyado por el crecimiento firme de la demanda externa.”

Por su parte, en Banorte sus analistas consideran que “persisten riesgos que derivarán en un menor dinamismo económico hacia delante. En particular, esperamos una desaceleración marginal del consumo privado ante los niveles elevados de inflación, lo cual estará compensado parcialmente por el dinamismo del empleo, así como del crédito bancario al sector privado. No obstante, el gasto interno continuará siendo uno de los principales motores de crecimiento de la economía mexicana.”