El nearshoring, como se conoce a la prestación de servicios desde países cercanos al país contratante, generalmente compartiendo fronteras, se ha consolidado como una buena estrategia comercial en todo el mundo.
Sobre todo porque el comercio internacional ha sufrido problemas como cuellos de botella en la cadena de suministro, sustitución de proveedores, retrasos en la producción y escasez de componentes, a consecuencia de la pandemia.
Pero analistas económicos y financieros señalaron, durante un podcast, que estos sucesos también trajeron oportunidades para ciertas economías, entre ellas las de India, China, América del Norte, y particularmente en México.
“Uno de los ejemplos más representativos para este tipo de prácticas, cuando se escalan a una estructura más desarrollada, son India y China, donde actualmente ya lideran este tipo de negocios”, explicó Luis de la Calle, doctor en economía.
De la Calle comentó que al evaluar de forma específica las oportunidades de crecimiento en las industrias, México tiene zonas que van muy bien encaminadas y que ya reciben los beneficios del nearshoring como la zona norte y el Bajío.
El país alcanzaría un máximo nivel de desarrollo a partir de la industria agroalimentaria o la médica, con farmacéuticos, biología molecular, pruebas para medicamentos; maquinaria especializada y herramientas de uso cotidiano, además la industria automotriz.
Cabe destacar la necesidad de integración de la zona sur, especialmente con el este de Estados Unidos, resolviendo los grandes retos de logística, energía, educación y reglas de operación, y que garanticen el Estado de Derecho para el beneficio del desarrollo de la región.
En este sentido, en América del Norte y particularmente en México, el especialista ve una oportunidad que debería aprovecharse despacio y de forma consistente, pues, dijo durante el episodio 19 de ‘Norte Económico’ de Banorte, presenta tres ventajas competitivas:
1- Pirámide demográfica joven, especialmente en México, donde la distribución etaria ofrece grandes oportunidades para planear proyectos a mediano y largo plazos.
2- El precio de la energía en la región es el más competitivo en el mundo, a diferencia de lo que sucede en países de Asia y Europa, lo que permite que la operación sea más rentable. En América, el gas natural cuesta 8 dólares por millón de BTU, en Asia 14 dólares y en Europa 26 dólares.
3- Ecosistemas de innovación, que florecen cuando existe la cultura de crear, pero requieren de apertura de pensamiento. En Asia, el control político genera una restricción de la creatividad por miedo a que cualquier innovación ponga en peligro la estabilidad del gobierno, una situación que no ocurre en México.