Hasta que no se inaugure el Aeropuerto Internacional de Felipe Ángeles (AIFA), el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) seguirá como la sede aérea más importante del país, y particularmente del Valle de México. Pero requiere mayor infraestructura para atender varios aspectos.
Recientemente, el Consejo Mundial del Viaje y el Turismo (CTTC) señaló que el AICM carece de la infraestructura necesaria para implementar el uso de certificados digitales Covid-19, porque los procesos de migración aún son manuales y los formularios necesarios para viajar se reparten de forma impresa.
“El aeropuerto actual tiene muy poca tecnología a nivel digital, todos los procesos son bastante manuales: Cuando vamos tenemos que ver a una persona de migración, enseñar pasaporte, en muchos otros países ya realmente hay poco contacto humano”, precisó Virginia Messina, vicepresidenta del consejo.
En una videoconferencia, Messina mencionó que tener infraestructura digital a nivel aeropuerto va a ser fundamental en los siguientes años. A este tema se suma el del rediseño del espacio aéreo como parte del Sistema Aeroportuario Metropolitano, que considerará al Aeropuerto Internacional de Toluca y al AIFA.
La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) dijo que esta ‘reforma’ llevará varios años, hasta que el sistema aéreo mexicano esté alineado y coordinado. Y el Sindicato Nacional de Controladores de Tránsito Aéreo (Sinacta) refirió que el rediseño aumenta el riesgo de incidentes en los vuelos hacia la capital.
El sindicato también mencionó que las personas son afectadas por la contaminación auditiva debido al incremento del ruido por las nuevas rutas de aterrizaje en el AICM, lo que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) rechazó y recordó que el sistema está avalado por la empresa francesa NavBlue.
Así mismo por la Agencia Europea de Seguridad, la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam) y por supuesto, la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC).
El rediseño también considera la construcción de una plataforma de emergencia por 200 millones de pesos, para que helicópteros y aviones aterricen. La edificación se ubicará en la zona nor-oriente del aeropuerto, en donde aún no hay construcciones.
Este tema quedó ‘un poco en el olvido’ porque otro llegó: La Administración Federal de Aviación (FAA) degradó la calificación –de la 1 a la 2- de la aviación mexicana debido al incumplimiento de estándares internacionales en capacitación de inspectores.
Lo que incluye la falta de una legislación fuerte que permita sancionar a los infractores de los reglamentos de aviación vigentes, por lo que las autoridades esperan que el nivel de la aviación mexicana se recupere a finales de diciembre de este año.
Otro problema se ve reflejado en la espera que los transportistas demoran para ingresar a la aduana del aeropuerto, que es de entre cuatro y cinco horas, cuando era de alrededor de media hora o máximo una hora, esto, como resultado de la saturación y el rezago en infraestructura.
Lo que para especialistas como la Asociación Nacional de Almacenes Fiscalizados (ANAFAC), podría resolverse si el transportista fuera parte de una base de datos y que como miembro se le diera un código QR. Durante el año pasado, en esta aduana se reportaron 747 mil 977 operaciones de importaciones.
Datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) también refieren que en el 2020 se registraron 110 mil 332 de exportaciones. De las 49 aduanas que existen en México, por número de operaciones la del AICM se ubica en la cuarta posición.
A esto se suma que el aeropuerto internacional, el más importante por el volumen de pasajeros que moviliza en el país, no cuenta con certificación ni nunca la ha tenido, basada en las recomendaciones de la OACI, por omisiones de las autoridades mexicanas, señaló la AFAC.
Para especialistas, la AFAC tiene deficiencias en el personal de verificación y certificación, por lo que no se han llevado a cabo los procesos necesarios para constatar que el aeropuerto ‘Benito Juárez’ cumple con las disposiciones de OACI. Aunque esto no quiere decir que sea inseguro o que haya problemas operativos.
En enero de este año, se dio a conocer que el presupuesto federal para el AICM se redujo en 77.4% respecto al 2020. Por lo que este año se tiene asignado un presupuesto de 803 millones 712 mil pesos, mientras que en 2020, el monto ascendió a 3 mil 563 millones 169 mil pesos, según la SHCP.
Esto porque para este año existe un programa de inversión con recursos fiscales de 2021, que es el mantenimiento de las pistas de aterrizaje y despegue, por 315 millones 128 mil pesos. Además, hay tres proyectos con recursos de años anteriores, entre ellos la rehabilitación de infraestructura sanitaria.
/Con información de El Financiero, Reforma, El Heraldo de México y La Jornada/