La construcción de una moderna terminal marítima, en el puerto de Omoa, departamento de Cortés, Honduras, generará más de 2,000 empleos entre directos e indirectos, en una primera fase.
Esta obra atraerá a empresas e industrias nacionales y extranjeras, así como navieras que exportaban o importaban productos a través de puertos guatemaltecos.
Además, es clave para el desarrollo social y económico de Omoa, porque llevará un flujo importante de turistas a la moderna terminal de cruceros que también instalarán.
La Terminal Marítima Portuaria de Cruceros, Marina, Cabotaje y Buques Mercantes tendrá una inversión 100% privada, superior los 2,800 millones de lempiras o 120 millones de dólares aproximadamente.
El Congreso Nacional aprobó el contrato de concesión de los servicios marítimos a los buques a la Empresa Nacional Portuaria (ENP), institución que tiene la exclusividad.
El proyecto fue acompañado por el Consejo Nacional de Inversiones (CNI) cuya misión es facilitar, acelerar y proteger la inversión privada, nacional y extranjera.
Además, tiene el apoyo de del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Banco Interamericano de Desarrollo (BID), agencia de Desarrollo de Estados Unidos (USAID) y la Cámara Nacional de Turismo (Canaturh), entre otros.
El inicio de la construcción está programado para septiembre y se espera que entre en operaciones a finales del 2023 o inicios del 2024. Las tres fases de construcción se desarrollarán en un periodo de siete años.
De acuerdo con una publicación de La Tribuna, mediante la competencia que generará esta terminal, se reducirá el costo de los fletes logísticos, volviendo a los puertos hondureños atractivos para inversionistas.
Además, la terminal se suma al proyecto de habilitación del tramo carretero Corinto-Quimistán de 44 kilómetros de longitud, que habilitará la zona Noroccidental al generar tráfico directo hacia Omoa y Puerto Cortés.