La carretera que unirá San Ignacio, Sinaloa, con Tayoltita, Durango, está a punto de concluir. De acuerdo con la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), la obra presenta un avance del 98% y se prevé que entre en operación a finales de julio de 2025, indicó Jesús Antonio Esteva Medina.
Se trabaja actualmente en el último tramo con tres frentes de obra, en los que participan 377 trabajadores y 50 máquinas. Uno de los puntos más avanzados es el viaducto El Sauz, de 144 metros de largo, cuyas trabes ya están fabricadas y serán colocadas entre junio y julio.
Además de mejorar la conectividad entre Sinaloa y Durango, esta carretera impactará positivamente en la vida diaria de más de 11 mil personas de ambas entidades. Solo en el municipio de San Ignacio, Sinaloa, más de 6 mil personas de comunidades como El Limoncito, El Puente, Los Humayes y San Fermín verán mejoras en el acceso a servicios de salud, educación y transporte. En Durango, localidades como Tayoltita, La Tecolota y Valderrama también se beneficiarán.
Han destacado autoridades locales y habitantes el impacto social de esta infraestructura. Armando Barrón Alvarado, presidente municipal de San Dimas, Durango, recordó que antes el trayecto entre Tayoltita y San Ignacio podía tomar hasta ocho horas. “En el sector salud esto nos traerá un gran alivio, porque siempre ha sido complicado trasladar a pacientes enfermos”, expresó.
Por su parte, María Victoria Sandoval Olivas, cuarta regidora del mismo municipio, señaló que la nueva carretera permitirá llegar en unas cinco horas desde Tayoltita hasta Mazatlán. “Antes ni siquiera se podía salir por carretera hacia Sinaloa. Esta obra nos va a acercar todo: Alimentos, servicios médicos, todo estará más al alcance”, comentó.
