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Durante los primeros nueve meses de 2025, la industria de la construcción registró una contracción de -2.7% en comparación con el mismo periodo del año pasado.

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La producción industrial del país volvió a resentir el freno del sector de la construcción, que en septiembre registró una caída mensual de 2.5%, con lo que acumuló cuatro meses consecutivos de retrocesos, de acuerdo con los principales grupos financieros del país.

 

Analistas de Monex, Banamex, Banco Base y Banorte coincidieron en que la construcción se mantiene como el principal lastre para la actividad industrial, afectada por la debilidad en la inversión pública y privada, así como por la persistente incertidumbre económica.

 

De acuerdo con Banamex, la contracción del sector se explicó principalmente por la caída de 3.2% en la edificación y de 3.0% en las obras de ingeniería civil, mientras que los trabajos especializados mostraron un crecimiento de 3.5 por ciento. Banorte resaltó la misma tendencia, destacando que la edificación retrocedió pese a la relativa estabilidad de los precios en el sector, y que la ingeniería civil hiló su quinta baja consecutiva ante la reducción del gasto en inversión física gubernamental.

Por su parte, Monex señaló que la caída de septiembre prolonga la racha negativa iniciada en junio, cuando comenzó a observarse un enfriamiento en la actividad constructiva, particularmente en proyectos de infraestructura y obra pública.

 

 

Banco Base añadió que el deterioro de la construcción también refleja la disminución de la inversión fija bruta, afectada por la elevada incertidumbre sobre el entorno económico y político del país, lo que podría tener implicaciones negativas para el crecimiento a largo plazo.

 

En el acumulado de los primeros nueve meses de 2025, la producción industrial muestra una contracción de -2.7% anual. En ese lapso, destacan los avances de 3.0% en edificación, 1.1% en trabajos especializados y un fuerte descensos en ingeniería civil (-26.8%), de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

 

Los especialistas prevén que, hacia el cierre del año, el sector de la construcción podría comenzar a estabilizarse, apoyado en una reducción del subejercicio del gasto público y una recuperación gradual de la inversión privada, conforme se atenúe el entorno de incertidumbre.

En suma, la debilidad del sector constructor continúa siendo un obstáculo para la recuperación de la actividad industrial mexicana, mientras que el repunte sostenido dependerá del dinamismo de la inversión pública en infraestructura y del fortalecimiento de la confianza empresarial.