Jorge Yarza, socio director de la empresa, informó: “Se están deteniendo algunos proyectos porque no existe suficiente fondeo para las inmobiliarias, al mismo tiempo que se están endureciendo las condiciones para las personas físicas al solicitar un crédito”.
Entre las causas de la situación dificultosa de las hipotecarias, las crisis en las economías del norte han golpeado de manera importante al reducir las tasas de empleo y alzar la morosidad de las hipotecas.
Yarza identifica que el asunto del conflicto es la disponibilidad de recursos con que se cuenta en el mercado crediticio y no los desniveles de tasas, lo que ha llevado a un descenso del 34% en proyectos inmobiliarios.