A la industria inmobiliaria en la Ciudad de México (CDMX) le tomará de tres a cuatro años recuperar el crecimiento y ritmo de producción; debido al freno por el cambio de reglas y el rediseño institucional de las políticas urbanas recientes. Lo que ha provocado retrasos en la entrega de inmuebles y en su construcción, así como una contracción significativa que podría ser de hasta un 50% en los próximos años para el ritmo de inversión promedio anual.

Así lo señalaron expertos consultados por Desarrollador Confiable (DC). “Es decir, se pasaría de un ritmo de inversión promedio anual de 2 mil 500 millones de pesos a uno de mil 250, considerando un escenario conservador; y si las cosas no mejoran, la disminución pudiera ser mayor”, estimó Gabriela Alarcón, directora de la organización DC. Agregó que otra medición que no se puede pasar por alto es que la capital aporta el 10% al mercado de vivienda a nivel nacional. En tanto que al cierre del 2019, el monto de financiamiento para el sector cerró en 330 mil millones de pesos, aproximadamente.

Así, los retos en construcción de vivienda nueva para la CDMX continuarán; toda vez que se estima una demanda potencial de hasta 75 mil nuevos hogares por año. Además, el inventario de vivienda muestra signos de agotamiento. Cabe destacar que ante la pérdida de dinamismo en el sector vivienda en la CDMX, Guadalajara, Monterrey, Querétaro, San Luis Potosí y Mérida, entre otras, comenzaron a atraer las inversiones, pues mantuvieron o mejoraron las condiciones de actividad para la industria.

Por su parte, Antonio Moya, director de Normatividad de DC, indicó que en el escenario de combate a la corrupción del sector, persisten las malas prácticas en la expedición de permisos; y el número de obras presuntamente irregulares de menor escala va en aumento con revisiones anormales.