Para el sector inmobiliario, este 2024 será fundamental en la integración de tecnologías y prácticas sustentables. La adopción generalizada de tecnologías basadas en la nube y el análisis de datos impulsarán la gestión de proyectos inmobiliarios promoviendo la eficiencia y la toma de decisiones ágiles, dio a conocer Arturo Bañuelos, director de proyectos y desarrollos de JLL LATAM.

Durante la presentación de las perspectivas inmobiliarias para el 2024, comentó que, en México, “la construcción sustentable continuará siendo un factor determinante en los proyectos inmobiliarios, desde la fase de planificación hasta la ejecución, enfocándose en la reducción del impacto ambiental y la promoción de la economía”.

¿Qué necesita el sector inmobiliario para adoptar tecnologías?

Gabriela Esquivel, directora de proyectos de hospitalidad de JLL México, comentó a su vez que, durante el 2024, las actualizaciones tecnológicas serán la mayor prioridad de los operadores hoteleros.

Se centrarán, dijo, en actualizaciones tecnológicas que mejoren la experiencia del cliente y optimicen funciones clave como recepción, alimentos y bebidas, entre otras.

En la interacción entre huéspedes y servicios hoteleros, la adopción de aplicaciones móviles, automatización de procesos internos y opciones de pago estarán más presentes; un ejemplo de ello son los chatbots, que aumentarán su tasa de adopción en más de 100% durante los próximos dos a cinco años.

Con la adopción de la realidad virtual, los usuarios pueden acceder a vistas previas del alojamiento como instalaciones y decoración para tener una experiencia emocional que ayuda a que el cliente pueda tomar decisiones más rápidas para las reservaciones.

Al referirse al tema de sustentabilidad, el sector hotelero tiene como objetivos ahorrar energía, reducir el consumo de agua, utilizar productos de limpieza ecológicos y la economía circular. En cuanto a la reducción en el consumo de energía, están la instalación de termostatos digitales en las habitaciones y el uso de iluminación LED, así como sistemas eléctricos que evitan que los huéspedes dejen luces y aire acondicionado prendidos.

También, se están cambiando todos los frascos de plástico de los amenities de baño por despachadores fijos instalados en los muros de las regaderas con el objetivo de reducir residuos.

"El uso de agua en los hoteles representa cerca del 24% del costo total de sus servicios, por lo tanto, reducir el gasto de agua ayuda a disminuir costos de operación y es una práctica fundamental en materia de sustentabilidad. Entre las prácticas más comunes que se están aplicando para ahorrar agua están el uso de inodoros de bajo flujo y los grifos y duchas eficientes", expresó Esquivel.

Gracias a estos avances, se espera que para el 2030 se hayan alcanzado varios objetivos de desarrollo sostenible relacionados con el turismo.