En los últimos años, el sector inmobiliario ha experimentado una transformación significativa impulsada por la incorporación de áreas verdes bien diseñadas en sus desarrollos.
“No se trata solo de embellecer el entorno, sino de generar un impacto positivo en la plusvalía de los inmuebles y atraer inversiones en proyectos urbanos”, comentó Fernanda Rionda, presidente de la Sociedad de Arquitectos Paisajistas de México (SAPmx), en entrevista con Real Estate Market & Lifestyle.
Sin embargo, aclara que no se trata solo de colocar césped. La arquitectura de paisaje va mucho más allá y considera aspectos como la captación de carbono, la mejora del microclima y la biodiversidad. En este sentido, un diseño adecuado no solo embellece el espacio, sino que también contribuye a reducir el efecto de isla de calor en las ciudades, lo que mejora la calidad de vida de los habitantes.
Ejemplos exitosos en el mundo confirman esta tendencia. Ciudades como Sheffield, en Inglaterra, han transformado su urbanismo con proyectos como "Grey to Green", que han reconvertido espacios pavimentados en parques y jardines pluviales.
Para el caso de Latinoamérica, dijo que Medellín es un caso paradigmático: gracias a su apuesta por el urbanismo social y la arquitectura de paisaje, logró integrar barrios previamente aislados y reducir las brechas sociales.
Para Fernanda Rionda, la arquitectura de paisaje es una disciplina que debe verse como un eje fundamental del desarrollo urbano y no como un elemento accesorio. "No se trata solo de vender más o que se vea bonito, sino de transformar ciudades", concluyó.
Con un mercado inmobiliario cada vez más consciente de la importancia de la sustentabilidad y el bienestar, las áreas verdes han dejado de ser un lujo para convertirse en una necesidad y una estrategia clave para aumentar el valor de los inmuebles y atraer inversiones.