En los últimos años, los hábitos laborales han experimentado un enorme cambio y, el trabajo remoto y los horarios híbridos se han vuelto cada vez más comunes desde la pandemia. Esto dio como resultado que las oficinas en casa hayan ganado popularidad.
Sin embargo, la prisa por empezar a trabajar desde casa hizo que muchas personas decidieran simplemente conectar una computadora portátil en la mesa del comedor. Y, si han estado haciendo esto durante algún tiempo, sabrán que no es la solución ideal.
Por eso, Point2Homes te dice cómo puedes optimizar tu oficina en casa y crear un espacio de trabajo organizado, práctico y ordenado en 5 consejos:
- Piensa en cómo tu oficina puede funcionar para tus necesidades
Algo fundamental es pensar en lo que realmente necesitas de tu lugar de trabajo. Recuerda que no es necesario que continúes trabajando en tu sala o comedor. Hazte varias preguntas que te ayudarán a seleccionar la mejor ubicación y equipo para realizar el trabajo. Aquí están algunas sugerencias:
- ¿Cuándo trabajas? ¿Dia o noche? Por la noche, debes asegurarte de no molestar a nadie, mientras que, durante el día, deberás asegurarte de que nadie más te moleste.
- ¿Qué tipo de trabajo estás haciendo? ¿Harás conferencias telefónicas frecuentes o grabarás video y audio?
- ¿Qué equipo necesitas para realizar el trabajo? Una conexión a internet confiable es un hecho, pero ¿también necesitas cosas como una pantalla verde o un equipo de grabación?
2. Asegúrate de tener privacidad
Lo ideal es que la oficina en casa esté apartada, esto te permitirá cerrar la puerta a cualquier distracción. Si esto no es posible, no quiere decir que no encuentres una manera de garantizar que puedas trabajar sin interrupciones. Algunas de las mejores oficinas en casa están escondidas en pequeños rincones del salón o el dormitorio. Elige una habitación que otros miembros de la familia no frecuenten durante tu horario laboral. Intenta separar el rincón de tu oficina del resto de la habitación. Reorganiza los muebles para crear una división adecuada del espacio o pon una cortina pesada para obtener la máxima privacidad y una atenuación del ruido más eficaz.
- Céntrate en la comodidad
Si has estado trabajando en la mesa del comedor o usando una silla normal en tu escritorio cuando trabajas desde casa, sabrás que no es una buena opción. Estos muebles simplemente no están diseñados para usarse durante horas y horas. Los dolores y molestias pronto pueden distraerte del trabajo, pero con el tiempo, pueden causar daños físicos graves a tu cuerpo y afectar tu bienestar mental. Gasta un poco de dinero en una silla cómoda y ergonómica. Los modelos con respaldo adecuado, asiento y reposabrazos ajustables en altura, ángulo de inclinación y rotación son ideales. Además, un escritorio ajustable puede permitirte trabajar de pie si sientes que tu cuerpo está cansado de estar sentado. También, un mouse pad ergonómico y un soporte acolchado para la muñeca para el teclado pueden mantener a raya el dolor de muñeca. Recuerda elegir un monitor que sea fácilmente ajustable para evitar la fatiga ocular; configura el monitor al nivel de los ojos para obtener mejores resultados.
- Que sea un espacio con luz natural
Es importante conseguir el equilibrio adecuado de luz en la oficina de tu hogar: si hay demasiada luz o demasiada oscuridad, corres el riesgo de forzar la vista. Lo ideal es una habitación con mucha luz natural. Esto no solo es mejor para tu estado de ánimo y productividad, sino que también reduce el consumo de energía.
Para los trabajadores nocturnos o las oficinas en habitaciones que no disfrutan de mucha luz natural, vale la pena invertir en una lámpara de escritorio ajustable de calidad en lugar de depender únicamente de la luz del techo principal.
- Establece un lugar para pensar.
Incluso con la mejor oficina en casa del mundo, a veces necesitarás un cambio de escenario para que fluya esa creatividad. Intenta configurar un espacio separado lejos de tu escritorio para realizar una lluvia de ideas o simplemente disfrutar de una taza de café mientras reflexiona sobre un problema. Un sillón cómodo puede ser una opción fantástica y una mesa de centro puede resultar útil.