Nacen en los noventas como una opción para atender a clientes con un perfil desatendido en el mercado por la banca, con la crisis de 1995 toman un papel fundamental en el financiamiento para la vivienda participando activamente en la colocación de crédito puente e individual, siendo en esa época prácticamente la única opción de financiamiento al estar la banca más preocupada por recuperar la cartera que generar nuevos créditos.
Durante la segunda mitad de la década de los noventa, crecen de manera muy importante y se especializan en este sector, reviviendo el concepto de la Banca Especializada. En este período fueron el motor que impulsó a la Industria de la Vivienda con procesos ágiles y hechos a la medida del negocio.
En el año 2001 la banca regresa al crédito hipotecario atendiendo principalmente a personas asalariadas y físicas con actividad empresarial y las Sofoles, además de atender a personas asalariadas, diseñaron esquemas para atender el mercado de economías alternativas, con novedosas formas de comprobación de ingresos y apoyados con fondeo de la Sociedad Hipotecaria Federal principalmente. Posteriormente surgieron las bursatilizaciones de cartera como otra fuente de fondeo.
Sin duda, el papel de las Sofoles de 1995 a 2008 fue relevante y de suma importancia para la industria, logrando un crecimiento sobresaliente.
Sin embargo con la crisis de 2008, afloraron situaciones que cuestionaron el modelo, al ser empresas no reguladas, su índice de capitalización no era tan sólido como en la banca, también, sus fuentes de fondeo eran limitadas y estaban expuestas a un mercado de mayor riesgo dado el perfil de sus clientes, en ocasiones, también se vieron relajadas sus políticas de otorgamiento de crédito con la finalidad de incrementar su participación en el mercado.
Lo anterior trajo como consecuencia que en los últimos 3 años hayamos visto una contracción muy importante en el sector de las Sofoles que han hecho importantes esfuerzos por permanecer.
Hablando de crédito hipotecario individual, durante el primer semestre de 2008 las Sofoles colocaron en el mercado 52,666 créditos por $24,088 millones de pesos mientras la banca en ese mismo período sólo colocó poco más de la mitad en número de créditos, 27,725 créditos por un valor de $20,595 millones de pesos.
En el primer semestre de 2011, las Sofoles solo han colocado 1,608 créditos por un valor de $805 millones de pesos, lo que representa en monto solo el 3.3% de lo que hacían en 2008.
El mercado que dejaron las Sofoles ha venido a ser atendido por la banca quien en el primer semestre de 2011 ha otorgado 47,985 créditos por un valor de $31,584 millones.
Hoy estamos viviendo una transformación fundamental de este sector, algunas Sofoles o Sofomes están reestructurando su modelo, otras fusionándose o integrándose a bancos y algunas pocas iniciando actividades, pero todas conscientes de su potencial y sus problemas.
Si se corrigen sus defectos seguramente podrían retomar el camino, con una regulación adecuada, fortaleciendo sus estructuras de capital, políticas de crédito adecuadas y un fondeo competitivo podrían seguir siendo un importante motor de la economía de este país, todo un reto junto con la Sociedad Hipotecaria Federal.
Sin duda, las Sofoles demostraron las grandes ventajas de la especialización y que el modelo funciona.
La pregunta ahora es si con los nuevos apoyos de impulso a la vivienda emitidos por el gobierno, veremos el regreso de la Banca Hipotecaria Especializada
Texto:Flavio Franyuti
Foto: PANORAMIO