Las mejorías que favorecen la eficiencia del menudeo físico, también aumentan la efectividad del menudeo remoto.
Sin duda nos encontramos en medio de grandes cambios en la tecnología del retail, donde los avances en el comercio electrónico permiten al consumidor realizar sus compras en cualquier momento y desde cualquier lugar, con el beneficio de que pueden ser entregados de inmediato en cualquier parte.
La tecnología móvil, como la de los teléfonos inteligentes, por ejemplo, permite que el consumidor señale los ítems que necesite, sin importar en qué mercado del mundo se encuentre y hacer que se le entreguen casi en cualquier sitio que desee. Miles de millones de dólares se invierten en los servicios de entrega denominada al mismo día; incluso, no sería descabellado que en un futuro próximo, drones de entrega pasen zumbando a nuestro alrededor, trayendo casi cualquier objeto on demand.
A pesar de lo emocionantes que estas nuevas tecnologías resulten, el menudeo virtual no es un fenómeno nuevo.
Lo que se reconoce comúnmente como el primer catálogo fue creado en Venecia, en 1498, casi veinte años antes de que Francisco Hernández de Córdoba pusiera un pie en Yucatán y más de 50 años antes del nacimiento de William Shakespeare. Desde entonces, el uso del catálogo y los servicios de entrega sucesivos continuaron creciendo, con lentitud, pero sin parar, hasta el siglo XIX en el que diversos factores, entre los que figuran mejores y más veloces redes de transporte, crearon un auge en el menudeo y consecuente crecimiento de la cultura de consumo.
Durante esa misma centuria (S. XIX), la red ferroviaria permitió que se abarcaran mayores distancias en menos tiempo, lo cual hizo que la entrega del correo y mover mercancías resultara más económico.
Asimismo, una flota de buques transoceánicos cada vez mayor, transportaba productos desde mercados, también cada vez más remotos; por su parte la revolución industrial contribuyó con la producción en masa y al almacenamiento de inventario en puntos centrales de distribución.
Los minoristas pudieron ser más ágiles al responder a las tendencias del mercado e inclusive las han creado y controlado, con mejor comunicación y medios que, debido a su proliferación, generaban más oportunidades para la publicidad que, en sí misma, a comienzos del siglo XX, se había convertido en el monstruo primordial que forjaba la actividad del consumidor.
A larga distancia
Las mismas mejorías que incrementaron la eficiencia del menudeo físico, también aumentaron la efectividad del menudeo remoto, como sucede en la explosión de las ventas por catálogo y entrega de pedidos por correo. En la actualidad continuamos usando todos estos canales para el marketing, así como para manufacturar y llevar a cabo la distribución, con la diferencia que las nuevas tecnologías ayudan a que todo suceda más rápido, desde sitios más remotos y con una menor interacción humana.
Existen estudios dedicados al reciente y dramático cambio en la participación del mercado del espacio físico al virtual. En donde el comercio electrónico ha realzado la eficiencia del menudeo virtual y con él, se ha generado un cambio mayúsculo en lo que a participación de mercado se refiere. Las prácticas de negocios del mundo real han tenido que adaptarse para gestionar el cambio y, sin duda, ha habido un efecto darwiniano en aquellos detallistas incapaces de adaptarse a esta evolución; sin embargo, es demasiado fácil culpar a un revés en una esfera por el éxito en otra, aun cuando el menudeo no es un juego de suma cero.
Sin importar qué tan radicales parezcan ser el internet y las tecnologías actuales para el comercio electrónico, no hay nada sustancial en el menudeo virtual. Hemos estado comprando “en línea” desde que se inventó el teléfono hace más de cien años. Entender por qué las tiendas reales no se volvieron obsoletas entonces, es importante para entender por qué el internet no las volverá hoy obsoletas.
Menudeo tradicional nunca desparecerá
El menudeo físico siempre existirá, aun cuando las tiendas reales no puedan competir con la facilidad o eficiencia del menudeo virtual, así, la presencia física siempre proveerá experiencias que el menudeo virtual no tiene a su alcance. En el nivel más fundamental, los consumidores siempre querrán ver, tocar y sentir ciertas mercancías, lo cual no puede hacerse a través de internet; sin embargo, la necesidad de espacio físico para el menudeo es más importante que simplemente crear un lugar para interactuar con los productos. Hoy nos damos cuenta de que la experiencia visceral, social de la compra no puede replicarse en un espacio virtual.
Apple, uno de los retailers en línea más grandes, pudo haber usado su propia tecnología para llevar enteramente al mundo virtual la interfaz con su cliente, y a pesar de ello, se encuentra expandiendo su presencia física. El gigante del menudeo virtual, Amazon, ha estado desarrollando sus primeras tiendas físicas en 2015. Aun cuando el menudeo virtual tiene como intención erosionar el menudeo físico tradicional, Amazon y Apple, dos gigantes del menudeo virtual, están redoblando su presencia física al proveer oportunidades para la interacción humana con su gente, sus productos y sus marcas.
Cuando miles de millones de dólares se están gastando para desarrollar tecnologías de compra que fomenten al aislamiento del consumidor, con todo desde sistemas de compra en línea hasta sistemas de entrega el mismo día a través de drones; cuando los teléfonos inteligentes se usan para hacer que naveguemos a través de la experiencia de compra física desde el estacionamiento hasta atravesar el punto de salida sin tener que hablar alguna vez con otro ser humano; cuando todas nuestras nuevas tecnologías están diseñadas para separarnos de otras persona, el espacio físico que rodea el menudeo se está convirtiendo en algo cada vez más importante para la interacción social. El lugar donde compres es una consideración igual de importante que la manera en que compres.
Calidad en espacios
El éxito de los desarrollos de retail dependerá de la calidad de los espacios que sean creados y de la experiencia de estaar en ellos. Los éxitos estarán determinados por el tipo de actividades que puedan ocurrir ahí, y en el cómo la gente interactuará con otros de esos espacios.
El mundo físico del menudeo ya no necesita ser una máquina optimizada para vender, para eso tenemos el internet; sino, más bien, una ubicación optimizada para vivir. El mensaje subyacente es que el futuro del diseño del retail se encuentra en la creación de lugares que permitan a la gente interactuar, obtener entretenimiento, y más que todo, participar en el tipo de estilo de vida que deseen.
La industria se refiere a esto como la práctica de placemaking, la cual, en sí misma, no es una práctica nueva. Desde que los antiguos griegos se paraban alrededor del ágora sobre sus sandalias, debatiendo de política y enfrascándose en el comercio, la civilización ha conocido el valor de construir un espacio físico para la interacción humana. Cada ciudad, pueblo, pequeño poblado de México tiene su propio Zócalo –un espacio físico donde la gente puede juntarse y conducir las actividades diarias de negocio y ocio–. Es natural tener comercios en cada calle principal y en cada plaza.
El comercio es el negocio de la interacción humana; se sigue de ello que los mejores espacios que podemos crear para el comercio son aquéllos creados para la interacción humana.
Al considerar con cuidado el futuro, Thor Urbana se dedica a crear un nuevo orden de placemaking en México. Thor Urbana reconoce la prominencia de sus proyectos y la responsabilidad de crear espacios cívicos significativos que resuenen en las comunidades alrededor de ellos. Al lograr experiencias dinámicas y auténticas hechas a la medida de sus localidades únicas, cada proyecto se convertirá en un paisaje dentro de su propia comunidad y un catalizador para el crecimiento valorado.
Dentro de cada proyecto Thor Urbana creará, artesanalmente, espacios con esmero para todo tipo de interacciones.
Desde espacios grandiosos para reuniones considerables hasta pequeños espacios para conversaciones íntimas, Thor Urbana se encuentra creando lugares con el interés físico y la variedad que ocurre orgánicamente en escenarios urbanos. Los hermosos paisajes y la innovadora programación que incluyen entretenimiento, compras al menudeo y comidas, reforzarán la calidad de la experiencia e inspirará a los visitantes a regresar una y otra y otra vez.
Thor Urbana no sólo traerá lo mejor en cuanto a menudeo clásico y diseño del menudeo al mercado mexicano, al crear lugares óptimos para la gente, sino que implementará las tecnologías más innovadoras para retailers, conceptos y arquitectura con el fin de crear una experiencia sustentable y memorable para el usuario final.
Un diseño ambientalmente responsable se asegurará de que estos nuevos espacios cívicos tendrán un impacto positivo y duradero en las comunidades en las que se construyan.
Cada proyecto tendrá oportunidades de promover una forma de vivir sustentable y de educar en el valor de las prácticas sustentables a cientos de miles de personas que visiten estos proyectos mensualmente.
Como iconos dentro de la comunidad, Thor Urbana reconoce el valor de usar la prominencia de cada uno de estos proyectos para promover una manera más responsable de construir y un estilo de vida más sustentable, de manera que podamos gozar de lugares como éstos, durante un largo tiempo por venir.
Texto:Elkus Manfredi Architects
Foto: Elkus Manfredi Architects