La Auditoría Superior de la Federación (ASF) señaló que la compañía de participación estatal Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec (FIT) tiene pérdidas de hasta 810 millones de pesos (mdp), generadas entre 2010 y 2018. Por lo que no es una empresa rentable y carece de capacidad para generar utilidades.
En contraste, los subsidios del gobierno federal han ido aumentado: En el 2012 eran de 190.5 mdp y para el 2018, de 396.5 mdp. Asimismo, la ASF encontró un incumplimiento en la rehabilitación de vías ferroviarias con recursos públicos y un probable daño millonario al erario.
El organismo incluyó la auditoría 1765-DE en su revisión de la cuenta pública 2018, realizada al Programa de Inversión y Mantenimiento de las vías Férreas Chiapas y Mayab 2015-2018. Tramo que va de Ciudad Ixtepec, en Oaxaca a Ciudad Hidalgo, Chiapas; mismo que ejecutó FIT.
Como parte de esa auditoría, indica El Universal, se revisaron contratos de adquisiciones; dos de arrendamiento, uno de servicios y seis de obra pública por un total de 284 mdp. Lo que representa 8.2% del total ejercido por la empresa en el 2018; que ascendió a 349.8 mdp.
Referente a la gestión financiera, la ASF determinó un probable daño o perjuicio a Hacienda de parte de Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, por 9.5 mdp; por bonificaciones efectuadas sin contar con la autorización de su procedencia.
Esta cantidad corresponde a 6.9 millones de pesos contenidos en 63 facturas por servicios de fletes y 2.5 mdp en siete facturas por derechos de paso y piso; lo que incumple la Ley General de Contabilidad Gubernamental, en sus artículos 42 y 43.
Por estas anomalías, la ASF formuló dos recomendaciones y tres responsabilidades administrativas contra FIT. Cabe destacar que la ferrocarrilera, que inició operaciones en el 2000, realiza el proyecto del Tren Transístmico.