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La mayor demanda a través del canal digital ha sido por alimentos, artículos de limpieza del hogar, alimento para mascotas y bebidas.

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La emergencia sanitaria por el COVID-19, incrementó el número de mexicanos que adquieren productos de consumo básico a través de Internet.

Un renglón en particular que se ha visto muy beneficiado por ello es el “supermercado”, que se ha convertido en una de las categorías más favorecidas en el e-commerce, tendencia que se mantendrá este 2021.

De acuerdo con Teamcore México, una plataforma de inteligencia comercial, cada vez más mexicanos hacen el “súper” en línea. “Hemos visto como muchos mexicanos, para evitar las aglomeraciones en las tiendas físicas, han optado por realizar sus compras en línea, una práctica que perdurará aun después de la pandemia, ya que se han dado cuenta de los beneficios que tiene, sobre todo el hecho de poder recibir su pedido en la puerta de su casa o ahorrar tiempo”, señaló Francisco Martínez, director general de la plataforma.

A lo largo de los meses de confinamiento, las categorías de productos que han registrado una mayor demanda a través del canal digital son: alimentos, artículos de limpieza del hogar, alimento para mascotas y bebidas.

A través de un comunicado, indicaron que sin embargo, para brindar una mejor experiencia de compra, las compañías de gran consumo y supermercados, que en 2020 tuvieron un crecimiento del 250% en el comercio electrónico, deberán tener en el anaquel virtual la mercancía que el cliente necesita en el momento indicado, ya que por ahora  más de 75% de las ventas de productos de consumo de rápido desplazamiento en América Latina son entregadas al comprador en línea desde una tienda física, lo cual complica la disponibilidad adecuada de producto en ambos canales.

El directivo consideró que previendo que las ventas en línea mantendrán su ritmo de crecimiento, los centros de operación de las empresas deberán tener e implementar una visión omnicanal, adoptando la tecnología necesaria para que se pueda lograr la integración de los canales físico y digital, lo que permitirá tener una mayor comunicación y así brindar un mejor servicio a los usuarios.

“El gran reto de las empresas de consumo masivo sigue siendo poder pronosticar la demanda de productos para mantener la permanente disponibilidad del producto en la góndola física y virtual”, concluyó.