La Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, exigió una disculpa a los partidos políticos y diversos legisladores que señalaron que la acusación que levantó su gobierno, a través de la Fiscalía General de Justicia local, contra la ahora suspendida alcaldesa Sandra Cuevas, debido a que era una “persecución política”.
Al respecto, la Fiscalía permitió ayer llegar a un acuerdo entre Cuevas y los dos mandos policiacos que agredió verbal y psicológicamente en febrero y por lo que se levantó una denuncia por robo, abuso de autoridad y discriminación.
El Ministerio Público acreditó el hecho y un juez determinó el pago de 30 mil pesos a cada uno de los policías afectados:
“A solicitud de la defensa de la imputada, se celebró audiencia en el Reclusorio Preventivo Varonil Norte durante la cual la servidora pública reconoció que los hechos ocurrieron tal y como el Ministerio Público lo acreditó, por lo que la imputada deberá pagar el costo de un radio de transmisión y de un teléfono celular”.
Cuevas además se someterá a seis meses a tratamiento psicológico por manejo de la ira y emociones. La alcaldesa deberá también abstenerse de realizar cualquier manifestación por cualquier medio de difusión y redes sociales con relación a los hechos, las instituciones y mandos policíacos.
El coordinador de asesores y vocero de la Fiscalía de la CDMX, Ulises Lara López, dijo que posterior a cumplir las órdenes de la juez, Cuevas podría retomar su cargo como alcaldesa.
Por su parte, Sheinbaum dijo que “ahí está la muestra que no tenía nada que ver con la política, que había víctimas y un delito que se había cometido”.
Con información de El Economista, El Financiero y redes sociales.