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En el interiorismo actual, el color es esencial para crear ambientes que expresen personalidad, comodidad y estilo. Hoy en día, ciertos tonos se usan para generar calidez y conectar con la naturaleza, otros para generar armonía y una atmósfera acogedora.

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La elección del color es estratégica, porque no solo define el estilo de un espacio, sino que influye en la percepción del tamaño, la luminosidad y el estado de ánimo, logrando que cada ambiente sea único y acogedor.

 

Por ejemplo, La marca de pinturas y recubrimientos Benjamin Moore anunció su Color del Año 2025: Cinnamon Slate 2113-40, un tono único que mezcla la calidez de un marrón aterciopelado con la sutileza de una ciruela grisácea. Este tono, conocido como "pizarra canela", se destaca por su capacidad para aportar un equilibrio armonioso y una atmósfera acogedora en cualquier espacio interior.

 

Según Andrea Magno, directora de mercadotecnia y diseño de color de la compañía, el creciente interés en colores saturados ha dado paso a tonalidades matizadas y complejas. "Cinnamon Slate ofrece un estilo atemporal y una sensibilidad moderna que brinda confort y calidez, convirtiéndolo en el nuevo favorito de quienes buscan un ambiente equilibrado y elegante”, explicó Magno.

 

 

 

 

La paleta Tendencias 2025 de Benjamin Moore complementa el Cinnamon Slate con diez tonos cuidadosamente seleccionados, que van desde neutros hasta colores más profundos, diseñados para dar vida a los espacios con elegancia. La colección incluye tonos como Sea Salt, Leather Saddle Brown y Paris Rain, cada uno aportando versatilidad y sofisticación para responder a las necesidades de personalización en el diseño de interiores actual.

 

Con esta paleta, reafirman la importancia del color en la creación de ambientes que inspiran, reflejan personalidad y generan confort, alineándose con las tendencias de un interiorismo más cálido y sensorial.